Pese a todo el progreso que alcanzaron las mujeres en la industria publicitaria, el acoso sexual aparece muy a menudo como un hecho de la vida. Se les pidió a varias mujeres prominentes en el negocio publicitario que cuenten sus experiencias en forma anónima, y este es el saldo de lo que dijeron:
“Hubo un tiempo en que me apasionaba por una pieza de creatividad, y por ese motivo, mi jefe me preguntó si yo tenía mi período”, dijo una ejecutiva de agencia. “Realmente lo agarré del brazo y le dije: ‘No, eso es ultrajante. A mí me emociona esta creatividad porque me importa, y yo le haré saber cuándo tenga mi período, así puede decidir cuán apasionada soy en realidad”.
Ella dijo que en los años siguientes otro hombre le preguntó si estaba atravesando la menopausia. “Cuando un tipo camina en un salón y se siente en control de todo, se le dice que un líder. Pero cuando una mujer lo hace, todavía se escuchan cosas como ésta: ‘Uy, allí está, absorta en sí misma y muy agresiva. Debe estar atravesando la menopausia”.
Una ejecutiva de agencia de raza mixta recuerda cómo cuando tenía unos 20 años, su jefe –el director de servicios de cuentas de una agencia- hizo un “terrible” chiste sobre sus parientes. Le dijo que su padre, que es blanco, debía haber conocido a su madre “en un sex show”, porque ella no era blanca. “Es horrible pensar que una persona senior pudiera hacer un chiste como ése a sus empleados”.
Una ejecutiva, que ha trabajo tanto en una agencia como en un cliente, recordó que una vez le encargaron coordinar una reunión en Montecarlo que incluía actividades para ambos miembros del matrimonio. Las actividades consistían en salir de compras e ir a ver la tumba de Grace Kelly, nada de lo cual le interesaba a su marido, el único hombre que iba en el viaje. Ella agregó que el prejuicio de género es “un zumbido que siempre está presente”.
De un pre-party de una agencia en la noche de los Effies, una ex staffer de DDB recuerda otro suceso. “Era una noche elegante. Yo estaba vistiendo de una manera adecuada; un vestido con un pequeño escote, pero no demasiado corto, y con mangas. Un ejecutivo global de DDB se me acercó y me dijo: ‘Qué hermosa vagina’“.
Una CEO de agencia reflexionó: “Hay un sentido de machismo, y lo he visto tanto en ejecutivos americanos como en extranjeros, así que no se puede decir que es una cosa cultural. Realmente hay un ‘club de hombres’ por sobre todo… es innegable”.
Si son inapropiados los comentarios sobre mujeres y sus cuerpos, o los chistes que se hacen sobre madres que van a buscar a sus hijos, “eso es sólo parte de lo que usted debe enfrentar”, agregó.
Una ejecutiva senior de agencia recuerda a un compañero de trabajo que puso una mano sobre su rodilla en un escenario profesional, además de varios hombres haciendo chiste inadecuados cuando la mandaban a buscar café en las reuniones de directorio muchos años atrás, cuando ella era la única mujer del grupo. El que tocaba la rodilla fue advertido por la agencia de mantenerse lejos de la mujer, porque había “demasiadas denuncias judiciales por acoso sexual contra él”. Pero no fue despedido.
