Best Buy está dejando de lado el modelo de agencia de record en favor de contratar shops sobre la base de proyectos y de llevar más trabajo publicitario in-house, informó la compañía.

El movimiento significa que la agencia Crispin Porter & Bogusky, con sede en Boulder, Colorado, tendrá que hacer muy pronto pitches para proyectos individuales junto a otras agencias si quiere continuar trabajando con el cliente. CP&B ha venido siendo la agencia creativa de Best Buy desde hace ocho años.

Crispin completó su trabajo a lo largo de la temporada de regreso a clases, dijo Jeff Haydock, vocero de la compañía. Ahora tendrá que competir con otras agencias para las fiestas, el momento más importante para los minoristas. Según el directivo, CP&B será bienvenida si participa de la puja.

“Crispin ha sido un gran asociado nuestro”, dijo Haydock. “Ellos tienen todo el acceso disponible para seguir realizando propuestas de trabajo”.

Un portavoz de la agencia declinó comentar si ella va a participar o no en el proceso y remitió la consulta de Ad Age a Best Buy.

Como parte del vuelco, algunos trabajos serán consolidados y otros proyectos pasarán a realizarse in-house; los detalles todavía están sin definir, según Haydock.

El minorista continuará trabajando con agencias en proyectos específicos. El cambio apunta a darle a la compañía mayor acceso a una variedad creativa. “Esto conducirá a una mayor amplitud para detectar las ideas de diferentes agencias”, señaló

El ejecutivo no pudo decir cuáles proyectos futuros estarán abiertos para que puedan se objetos de pitches, ni si el anunciante tiene una shortlist de agencias con las que planea trabajar. “Mi presunción es que seguramente hay algunas agencias en las que está pensando el equipo”, agregó.

La nueva estructura de agencias está conectada con una estrategia de cambios de marketing más amplia que está siendo supervisada por el CMO Greg Revelle, quien se unió a la compañía en noviembre último después de conducir el marketing y el e-commerce de AutoNation. Desde que asumió el rol en Best Buy se focalizó en aumentar los esfuerzos digitales de marketing del minorista. La compañía introdujo un registro de regalos de casamiento y realizó más campañas digitales, aunque se abstuvo de participar entre los anunciantes de los últimos Super Bowls.

Best Buy también informó que un proyecto de data llamado Athena, que fue presentado a la compañía antes de la designación de Revelle, permitirá a la empresa entregar mensajes personalizados basados en la historia del browser y las anteriores compras de los candidatos a recibirlos.

Best Buy invirtió 654,8 millones de dólares en publicidad dentro de Estados Unidos durante 2013, según el DataCenter de Ad Age.