Carter Murray no lleva todavía tres meses en su nuevo puesto como ceo de Draftfcb, pero no pierde tiempo en poner su impronta en la compleja realidad de su shop al sacudir las filas de sus altos ejecutivos.

La semana pasada, Murray designó al veterano creativo Lee Garfinkel como ceo de la oficina de New York, un movimiento inusual si se considera que las agencias no contratan a menudo creativos para los puestos de ceos.

Desde la designación de Murray en septiembre, los cambios ejecutivos incluyen:

-      Nombrar a los ex ejecutivos de Publicis Chris Shumaker y Nigel Jones como cmo de Draftdcb para Norteamérica y worldwide chief strategy officer respectivamente.

-      Ubicar en octubre a Morgan Shorey, otro discípulo de Publicis, como vicepresidente senior de strategic business development.

-      Contratar a Karen Spiegel desde R/GA (Interpublic) como vicepresidente de comunicaciones globales.

-      Retener a Jonathan Harries, que planeaba dejar la agencia a fines de año, como global chief creative officer.

-      Promover a Elyssa Phillips al cargo de chief of staff.

Estos movimientos, tomados en conjunto con la designación de Garfinkel como ceo de New York, indican que Murray está ansioso por ubicar más talentos creativos dentro de los puestos clave del liderazgo, y mejorar la reputación de la agencia en ese terreno. Desde su fusión con Draft, las cuentas creativas principales de la ex FCB, incluyendo las de SC Johnson y MillerCoors, habían dejado la agencia. Otro cliente creativo, Taco Bell, ha reducido en gran forma su dependencia de Draftfcb.

Antes de la llegada de Murray –e incluso después de ella- la agencia tomó un número de cuentas pequeñas, entre ellas las de Aramark y Raybern Foods.

Antes del ingreso de Murray, la oficina de Chicago de la agencia retuvo la creatividad de Kmart luego de un prolongado review. Draftfcb fue la agencia número 6 en tamaño dentro de Estados Unidos, con ingresos por 443 millones de dólares, por debajo del puesto número 3 que tenía en 2011, según el DataCenter de Ad Age. Es la 13º cadena global de agencias, con 1.300 millones en ingresos.

La oficina de New York, en lugar de la de Chicago, es ahora el emblema de la cadena. Murray dijo que no hay planes de renovar los rangos superiores de Chicago, dado que “ellos están tomando nuevos negocios y haciendo un gran trabajo para nuestros clientes”.