Marketing Global

INVESTIGACIÓN-BRANDING: DISNEY

Disney: un sueño

(Por Santiago Balza) – La historia de un emblema de la industria del entretenimiento mundial que surgió de la mente de un soñador brillante.

Disney: un sueño
El estudio que fundó Walt Disney hoy es uno de los multimedios más importantes a nivel global.

Walt Disney nació en Chicago el 5 de diciembre de 1901. A muy corta edad, se mudó con su familia a una granja en Marceline, Missouri. No podía realizar trabajos rurales ya que era muy joven, por lo que pasaba la mayor parte del tiempo dibujando o jugando. En su adultez, Walt definiría esta etapa como “la más feliz de su vida”. En 1909 la familia Disney emigró a Kansas City. Su padre consiguió un trabajo de repartidor de periódicos y Walt y su hermano Roy lo ayudaban. En sus años escolares nunca fue un gran estudiante, pero era el historietista del periódico de la institución. Con el correr de los años, Walt decidió que su pasión se convirtiera en una profesión y consiguió un trabajo para crear avisos publicitarios para diarios, revistas y cines. Luego de diversos empleos como animador y tras un frustrado intento independiente, en 1922 fundó Laugh-O-Gram Films, una productora de cortometrajes animados basados en cuentos de hadas y relato para niños. Un año más tarde, la compañía se declaró en bancarrota y Walt decidió mudarse a Hollywood.
En Los Ángeles, fundó la compañía Disney Brothers Cartoon Studio junto a su hermano Roy. Su corto titulado Alice’s Wonderland despertó el interés de la compañía M.J. Winckler Productions, que contrató al estudio para que hiciera películas animadas.
El primer gran personaje de fantasía de Walt fue Oswald the Lucky Rabbit, del cual se hicieron 26 cortos. Sin embargo, los derechos de Oswald le pertenecían a M.J. Winkler Productions, por lo que los hermanos Disney solamente vieron unos pocos dólares de sus ganancias y, al poco tiempo, expiró el contrato que tenían para producirlo.
Para superar el mal trago, Walt desarrolló un nuevo personaje llamado Mortimer Mouse, pero por recomendación de su esposa lo rebautizó como Mickey Mouse. Los dos primeros cortos con el ratón más famoso de la historia vieron la luz en 1928 y se titularon Plane Crazy y Gallopin’ Gaucho. El tercero ya contó con sonido y se estrenó ese mismo año bajo el nombre de Steamboat Willie. A principios de la década del 30, Mickey sumó a sus eternos compañeros de aventuras, como el Pato Donald, Pluto y Goofy.
El estudio también desarrolló una serie de caricaturas de carácter semi abstracto llamadas Silly Symphonies. Entre ellas se destacó Flowers and Trees, de 1932, que fue la primera película animada en tres colores y se convirtió en la primera caricatura en ganar un Oscar. Un año más tarde, The Three Little Pigs, otro título de la misma serie, se consagró con el mismo galardón.

Los primeros largometrajes
En 1937, Disney estrenó Blancanieves y los Siete Enanitos, que si bien no es considerado como el primer largometraje animado fue el primero en ser un gran éxito de taquilla. Esta película revolucionó la industria y demostró que las caricaturas también resistían guiones de más de una hora. Los próximos largometrajes de la compañía fueron Pinocho (1940), Fantasía (1940), Dumbo (1941) y Bambi (1942). Todos fueron aclamados por el público y se convirtieron en películas de cabecera de niños de varias generaciones.
Durante los años siguientes, el estudio se concentró en desarrollar dibujos animados de menor duración o películas de cortos como Los Tres Caballeros o Melody Time. También crearon documentales y películas que combinaban dibujos animados y personas. Pero la realidad es que ningún título de este período se convirtió en un gran clásico.
La década de 1950 comenzó con películas muy exitosas como La Cenicienta (1950), Alicia en el país de las maravillas (1951) y Peter Pan (1953). Paralelamente, Disney tuvo su primera experiencia en televisión en la cadena NBC con el especial An Hour in Wonderland en 1950. Sin embargo, recién en 1954 lanzaría su primer programa de TV en transmitirse en forma regular bajo el nombre Walt Disney’s Disneyland. En este show televisivo se estrenaban nuevas caricaturas pero también se exhibían viejos títulos del estudio. Este formato se mantuvo ininterrumpidamente en el aire por varias décadas, a pesar de ir cambiando a Walt Disney Presents, o The Wonderful World of Disney. Su éxito fue tan grande que la compañía comenzó a producir otros programas de TV como The Mickey Mouse Club, Davy Crockett y El Zorro.

Disneyland y el adiós a Walt
En julio de 1955 se inauguró el parque temático de Disney en Anaheim, California, bajo el nombre de Disneyland. Una de sus estrategias de comunicación se basó en mostrar pequeños fragmentos del lugar en el programa Walt Disney’s Disneyland. También se desarrolló un especial de televisión con Art Linkletter y Ronald Reagan como invitados. Su lanzamiento despertó gran interés en muy poco tiempo y amplió notablemente la estrategia de negocios de Disney. En el parque podían verse atracciones para toda la familia, que iban desde juegos de acción para los más grandes o desfiles de personajes para los más chicos. En 1959 el predio experimentó una gran expansión que incluía el primer monorriel en Estados Unidos, y a mediados de los 60 se anunció un segundo parque que se edificaría en Orlando, Florida.
Paralelamente, los grandes títulos en la pantalla grande continuaron: La Dama y el Vagabundo (1955), La Bella Durmiente (1959) y 101 Dálmatas (1961) fueron algunos de los largometrajes de esta época. Pero Mary Poppins merece un capítulo aparte, ya que hay quienes la consideran el mayor éxito del estudio en más de 20 años. Esta película de 1964 recibió cinco premios Oscar y fue nominada en otras siete categorías.
El 15 de diciembre de 1966, Walt Disney falleció por complicaciones relacionadas con su cáncer de pulmón. Su hermano Roy asumió el puesto de chairman y CEO de la compañía. Una de sus primeras determinaciones fue cambiar el nombre Disneyworld por Walt Disney World en su honor.
En octubre de 1971 se inauguró el tan esperado parque de Orlando, bautizado Walt Disney World. El mismo Roy Disney se encargó de recorrerlo y supervisarlo personalmente. Sin embargo, en diciembre de ese año falleció a causa de un derrame cerebral. Donn Tatum, Card Walker y Ron Miller, yerno de Walt, pasaron a ser los directivos al frente de la compañía.

La vida después de los hermanos Disney
Durante los 70 y principios de los 80 pocos films del estudio tuvieron grandes repercusiones. Algunos de los más destacados fueron Robin Hood (1973) o The Rescuers (1976). Pero la compañía implementó una muy acertada estrategia para distribuir sus viejos clásicos a lo largo de todo el planeta. A su vez, Disneyworld se convirtió en el destino turístico más visitado del mundo.
Para competir con la fiebre de Star Wars, se estrenó en 1979 la película The Black Hole. Si bien no obtuvo la popularidad esperada, fue la primera de Disney en Estados Unidos en llevar la sigla PG de “parental guidance”. Siguiendo el mismo estilo narrativo, que apuntaba a la fantasía y rozaba el terror, el estudio lanzó The Watcher in the Woods y Tron, que tampoco fueron muy aclamadas en las taquillas. Pero los personajes más emblemáticos de Disney continuaron mostrando una muy buena performance: en 1983, Mickey’s Christmas Carol originó una serie de películas de temáticas similares que tuvieron gran popularidad.
En el plano directivo, la empresa comenzó a vivir cambios estructurales. En 1983, la división de producciones de películas fue nombrada Walt Disney Pictures. Un año más tarde se creó Touchstone Films como otra marca de Disney para rodar grandes producciones para cinematográficas. Paralelamente, desde principios de la década ya contaban con la división Walt Disney Home Video para distribuir sus películas en formato de video. Aunque el mayor avance en ese sentido fue el debut de The Disney Channel como un canal de cable en Estados Unidos, que exhibía series y películas clásicas del estudio y también nuevos programas originales.
En octubre de 1982 vio la luz Epcot Center, el segundo parque de la firma en Orlando, que era un antiguo anhelo de Walt Disney de crear una ciudad del futuro. En 2983 se inauguró Tokyo Disneyland en Japón, el primero fuera de Estados Unidos.
Bajo el sello de Touchstone, en la segunda mitad de los 80 se desarrollaron películas como Down and Out in Beverly Hills (1985), Good Morning, Vietnam (1987), Dead Poets Society (1989) y Pretty Woman (1990). Estos títulos apuntaban a un público más adulto y mostraron buenos resultados comerciales. Disney también volvió a marcar tendencia en el mundo de la animación con nuevos clásicos de la pantalla grande como ¿Quién engañó a Roger Rabbit? (1988), La Bella y la Bestia (1991), Aladdin (1992) y El Rey León (1994). También surgieron series animadas de TV con formatos muy novedosos como Adventures of the Gummi Bears, DuckTales o Chip ‘n Dale: Rescue Rangers.

Un imperio audiovisual
Disney siguió diversificando sus negocios con la compra del estudio Miramax Films en 1993. Ese mismo año, la compañía pateó el tablero al fundar un equipo de hockey sobre hielo de la NHL, los Mighty Ducks de Anaheim, y también adquirió una parte minoritaria del equipo de béisbol de la misma ciudad.
En 1995, el estudio compró la red ABC, que incluía los canales de deporte ESPN. En 1998 apuntó hacia internet con las adquisiciones de Starwave e Infoseek y la creación del portal Go Network.
Sus parques temáticos continuaron expandiéndose, y en 2005 se celebraron los 50 años del primer Disneyland con grandes festejos en todos sus parques de alrededor del planeta. En septiembre de ese mismo año también se inauguró Hong Kong Disneyland. Desde el lanzamiento de la película Toy Story en 1995, Disney y Pixar mantenían una relación muy estrecha con grandes éxitos como Monsters Inc. o Buscando a Nemo. La realidad era que Pixar funcionaba como una especie de gran productora de películas de animación por computadora para el sello del ratón. Esa ecuación provocó que Disney comprara Pixar en una operación multimillonaria en 2006. En ese mismo sentido, Disney realizó dos grandes inversiones al adquirir Marvel Entertainment en 2009 y Lucasfilms en 2012. De esta manera, el estudio se apropió de gran parte de la interminable lista de superhéroes de Marvel y de toda la saga de Star Wars. Como era de esperar, el volumen de películas de ambos sellos aumentó de manera significativa de la mano de Disney.
Si bien aún falta resolver algunos asuntos legales, a finales del año pasado Disney compró una gran parte de la cadena 21st Century Fox por 52.000 millones de dólares, decisión que indica que la marca Disney sigue creciendo. Un pequeño gran sueño que surgió de la imaginación de una de las personas más creativas de la historia. Un legado inagotable que lleva casi 100 años entreteniendo a grandes y chicos de todo el mundo.

Santiago Balza

Por Santiago Balza

Compartir nota