Llega la primavera y el buen tiempo altera los patrones de consumo; se modifica el comportamiento de las personas y algunos de nuestros hábitoscomienzan a cambiar. La transición de una estación a otra, es el momento en que las personas definen los hábitos que adoptarán por los siguientes cuatro meses; se convierte en una época de renovación, en especial para la publicidad y las marcas.

Un dato de cara a fin de año: según la Cámara de Comercio de Santiago, las ventas totales del comercio en diciembre 2014 (excluyendo vehículos motorizados) bordearon los 7.900 millones de dólares, de los cuales 1.690 millones corresponden al gasto extraordinario originado específicamente por la celebración de las fiestas de fin de año.

De acuerdo con estos antecedentes, el mayor incremento de gastos en relación a los demás meses del año se produce justamente en artículos como vestuario, que es del orden de 111 mil pesos por familia y juguetes, que es de 55 mil. El gasto en artículos deportivos también se acentúa en diciembre, mes en que se vende un total de  11 mil pesos por familia, cifra muy superior  al promedio de 3 mil que se registra en el resto de los meses.

Para poder cubrir esta demanda estacional de los consumidores, las ofertas también deben variar, adaptándose a las necesidades del momento. Por lo tanto, las empresas deben estar preparadas para adecuarse a los nuevos requerimientos y, por sobre todo, asegurarse de que las propuestas sean percibidas y valoradas correctamente. Es el momento para revisar las estrategias comerciales e implementar un buen plan de marketing de cara a un nuevo panorama.

Para ello, las marcas tendrán que buscar formas de satisfacer las necesidades de los consumidores en fechas concretas y realizar campañas que respondan a una estrategia de marketing estacional. Conseguir nuevos clientes o lograr fidelizar a los ya existentes, son los principales objetivos pero, ¿cómo podemos sacar el máximo provecho a esta época de mayor consumo?

Es muy importante anticiparse a las tendencias de la temporada. Los consumidores cambian su forma de vestir, compran otros tipos de alimentos, buscan entradas para festivales, espectáculos al aire libre, viajes, etcétera; aplicar descuentos a estos rubros es una excelente táctica de marketing estacional anticipado, que producirá un aumento considerable en el volumen de ventas.

El uso de redes sociales, es otra maniobra que se puede aprovechar y que permitirá interactuar con los consumidores. Generar contenidos con temas que tengan que ver con las fiestas, agregar palabras claves o hashtags, códigos de descuentos o crear promociones, es fundamental a la hora de fidelizar a los clientes.

En definitiva, las empresas deben prepararse y evolucionar junto con sus clientes. El análisis continuo de las campañas de marketing son cosas esenciales para no basarse sólo en los éxitos del pasado, sino también en la identificación de oportunidades inesperadas para el producto o servicio que se desea difundir. Siempre hay que estar atentos de aprovechar al máximo los recursos y buscar constantemente nuevas formas de ampliar la temporada de ventas.