Tim Ellis, que se incorporó a VW en diciembre como vicepresidente de marketing, sostuvo que la determinación de lanzar un campaña única es una decisión “inteligente en el plano económico” porque VW no tiene el mismo presupuesto de comunicación que sus competidores.

En 2007, la empresa automotriz alemana invirtió 170 millones de dólares en medios en Estados Unidos. La mayoría de las campañas fueron desarrolladas por la agencia  Crispin, Porter & Bogusky.

Sin embargo, durante 2006 y 2007 algunas de las campañas fueron creadas bajo la dirección de Kerri Martir, director-brand innovation de VW, que abandonó la compañía de forma abrupta en enero del año pasado. Su puesto aun no fue ocupado.

La nueva campaña, creada por Crispin, Porter & Bogusky, tendrá como protagonista a un VW Beetle negro de 1964, que fue llamado Max, que aparecerá en todas las piezas de comunicación.

Ellis definió al vehículo como “el nuevo y afectivo icono de la marca”  y como “el pegamento de la campaña”.

La campaña, que debutó en Alemania a fines de 2007, adopta el titular global “The Car”, pero en su versión estadounidense se le agrega “What the People Want”.

A su vez, Ellis sostuvo que duda de que las malas ejecuciones del pasado tengan un alto impacto y que VW “necesita una coherente promesa de marca”.

En los primeros tres meses de 2008, la automotriz alemana vendió más de 50 mil vehículos en Estados Unidos, y superó así en un 0,4% las ventas del mismo período del año pasado.

Durante 2007, VW no lanzó ningún nuevo modelo en el país del norte, pero la empresa se muestra confiada en cumplir con su promesa de cuadruplicar las ventas de la última década en ese mercado: “Lo que VW hizo muy bien durante todos estos años es crear una personalidad de marca muy clara que atrae a la audiencia joven. Tenemos que retener esa base pero también debemos hacerla crecer”, dijo Ellis.