The New York Times está “explorando la posibilidad” de vender la suscripción de un paquete de “alto nivel”, libre de publicidad, afirmó el chief executive Mark Thompson en el IAB Ad Blocking & User Experience Summit, un evento al que no tuvo acceso el periodismo.

“Queremos ofrecer a nuestros usuarios todas las opciones que podamos, y reconocemos que hay algunos de ellos –tanto suscriptores como no-suscriptores- que preferirían tener una experiencia sin avisos publicitarios”, dijo, según pudo averiguar Ad Age.

El Times, a comienzos de marzo, comenzó a testear enfoques para combatir el aumento de la tecnología de ad-blocking, que amenaza con minar la confianza de la industria en la publicidad digital. La compañía probó tanto los pedidos por “dismissable notices” (que permiten al usuario seguir leyendo sin suscribirse) como las “no-dismissable notices” (que sí requieren la suscripción).

En otro momento, Thompson tuvo duras palabras para Eyeo, que es propietario de la tecnología líder de ad-blocking Adblock Plus, y produce el programa de lista blanca Acceptable Ads, al cual algunos editores pagan para tener a sus avisos exceptuados del bloqueo.

“Esa es una práctica de negocios manifiestamente repulsiva”, dijo el hombre del NYT.

“Los adblockers a menudo se definen a sí mismos como una respuesta a la insatisfactoria experiencia de la publicidad digital. Pero Eyeo no fue fundada por ciudadanos preocupados; fue fundada por un veterano de la publicidad digital y representa el extremo más cínico y codicioso del antiguo y no reformado negocio de la publicidad digital. Necesitamos exponer a Eyeo, Adblock Plus y la lista Acceptable Ads, para que la gente pueda verlos tal como son”.

Hablando en general, Thompson dijo que los marketers “necesitan pensar como programadores en lugar de hacerlo como anunciantes tradicionales”, ofreciendo a los consumidores “contenidos con real valor para ellos”.

La publicidad será siempre una fuente vital de ingresos para el Times, agregó, al puntualizar que unos 107 de los 110 millones de personas que acceden al diario no son suscriptores pagos.