Sega ladra fuerte con el iDog

Es el nuevo chiche de Sega Toys y la compañía lo muestra orgullosa a todo el mundo. Se trata del iDog, un perro robot que responde a los estímulos del exterior -los que le pueda emitir su dueño-, aunque en sus tripas sólo existan cables y chips. Los científicos de las grandes compañías se esfuerzan por inventar un mundo artificial alrededor del hombre, que le ayude a matar, a limpiar, a pensar, y ahora a entretenerle como lo hace un pekinés o un pastor alemán. Además, se le puede enchufar MP3 en el trasero.

Electrodomésticos inteligentes, robot soldados que acuden a la guerra, y ahora una mascota que no tiene necesidades que no se puedan satisfacer con una batería nueva y que responde a las caricias de su dueño. Este iDog contiene 720 frases musicales internas, que le sirven para responder al estímulo. Además, puede improvisar nuevas consonancias cuando el dueño le acaricia el fototransistor de la cabeza.

Aunque tiene esa capacidad, la calidad de su inspiración puede ser limitada. También las luces que incorpora se iluminan de una forma u otra -colores e intensidades diferentes-, en función del amor que muestre su amo por él. Como toda mascota, el iDog necesita cariño y dedicación.

La nueva creación de Sega se presentó a los medios en su sede de Tokio el pasado 25 de enero. Las ventas de la mascota “perfecta” comienzan en abril en Japón, por un precio aproximado de 40 dólares. Además, iDog se lanzará también en los mercados estadounidense, europeo y asiático, gracias al acuerdo firmado con Hasbro, entre los meses de agosto y septiembre.