Medios > Estados Unidos | UN HECHO INESPERADO PARA EL PRESIDENTE
Por Ad Age |
La página personal del presidente Donald Trump en Twitter fue desactivada durante once minutos por un empleado que estaba por dejar la compañía. A pesar de que Twitter tiene controles para impedir que sus empleados hagan tuits desde las cuentas de los usuarios, el incidente sugiere que esa persona todavía tuvo algún acceso a las cuentas, y la capacidad de hacer cambios sin demasiada supervisión o necesidad de aprobación.
“A un alto nivel, esto implica una suerte de complacencia, que las organizaciones generalmente están tal vez tratando de convencerse a sí mismas de que tienen dominada la tecnología de riesgo”, dijo Yvette Connor, chief risk officer de Focal Point Data Risk, que asesora a directorios y ejecutivos en seguridad tecnológica. “En el caso de Twitter, el riesgo reputacional que enfrentan es que la información que está bajo su cuidado, custodia y control no está realmente bajo su cuidado, custodia y control”.
La persona responsable por la desactivación de la cuenta puede también no haber sido un empleado full-time sino un contratista, según un informe de The New York Times, que no citó sus fuentes.
“Hemos sabido que esto fue hecho por un empleado de apoyo que lo hizo durante el último día de su trabajo en la empresa”, tuiteó la compañía, después de citar “inadvertencia” y “error humano” en un posteo previo. Twitter dijo en sus posteos que estaba investigando y dando pasos para impedir la recurrencia del incidente, pero no dio detalles específicos. La compañía declinó hacer otros comentarios más allá de los posteos.
Este incidente pone de relieve la necesidad de que las compañías, especialmente las que tienen grandes cantidades de data, aumenten sus capacidades de control y sigan de cerca a los empleados que tienen el control administrativo y el acceso a la información, dijo Connor. En particular, las compañías de tecnología del consumidor reúnen y guardan un gran tesoro de información de consumidores y no siempre controlan estrictamente el acceso a los empleados de control, un punto que los expertos en privacidad han destacado a menudo. Uber Technologies Inc. sufrió un golpe después de haberse revelado que sus empleados podían encontrar y rastrear los viajes de sus usuarios.
Con un sistema seguro que mantenga el rastreo de las actividades y controles, “Twitter hubiera sabido en 30 segundos –o 15- que la cuenta del presidente había sido desactivada”, añadió Connor.
Cuando cayó la cuenta de Trump, los intentos por llamar a su página personal (@realDonaldTrump) recibían un mensaje que decía: “Disculpe, esa página no existe”, lo que hizo que muchos usuarios de Twitter enviaran imágenes de la pantalla. La official feed del presidente norteamericano, @POTUS, no fue afectada.
“Mi cuenta de Twitter fue desactivada durante 11 minutos por un empleado deshonesto”, tuiteó Trump al reaparecer en el sitio social. “Creo que la palabra finalmente saldrá a la luz, y tendrá un impacto”.
Twitter ha enfrentado la crítica de muchas personas que dicen que la compañía debería prohibir el servicio del presidente por violar sus términos de servicio. Donald Trump utiliza con frecuencia a Twitter para comunicar sus pensamientos, a veces en forma de comentarios despectivos o despreciativos. Las reglas de Twitter permiten a la compañía suspender cuentas por amenazas violentas, ataques basados en los géneros y otras formas de abuso o acoso.
La compañía actualizó sus reglas el viernes último, al clarificar que el contexto de tuits –que incluyen si el contenido es “valioso”- es clave para decidir qué conducta fue abusiva y cómo tratar con el caso. Twitter dijo que proveerá más detalles de estas políticas en los próximos días.
El incidente con la cuenta de Trump despertó una tormenta online. Y mientras los adeptos al presidente utilizaron la oportunidad para reclamar medidas de seguridad, muchos usuarios de la red social elogiaron el último acto del empleado, hasta llamar lo “héroe” o “tesoro nacional”, y otros llegaron a invitarlo a la fiesta de Thanksgiving. El representante Ted Lieu, un demócrata de California, hizo pública una oferta de compra en Pizza Hut para el empleado, por “hacer que América se sienta mejor durante 11 minutos”.