Marketing > Argentina | WTW ARGENTINA 2018
Por Redacción Adlatina |

Pauline Lozé: “Me gusta la idea de poder serle útil a la gente”

La directora general de la división Cosmética Activa de L’Oréal Argentina habla de la importancia de este tipo de reconocimientos y explica la función que tiene la cosmética activa en la prevención y el cuidado de la piel.

Pauline Lozé: “Me gusta la idea de poder serle útil a la gente”
“Me apasiona cómo podemos ayudar a personas con enfermedades crónicas a mejorar su bienestar”, destaca Lozé, emocionada, sobre su trabajo en la división de cosmética activa.

Pauline Lozé es francesa y vivió en México, donde comenzó su carrera profesional en el mundo de la dermocosmética. En 2003, de regreso a París, se integró a L’Oréal para desarrollar la marca Vichy para América Latina. Luego ocupó diferentes responsabilidades: entre ellas, la de directora de marketing para las marcas Vichy, Inneov y Sanoflore. En 2010 asumió el desafío de desarrollar las marcas Roger Gallet y Sanoflore en Europa. En 2013 asumió el cargo de directora de marca La Roche-Posay para la zona América, con base en París, su último rol hasta su designación como directora general de cosmética activa para la Argentina. 
La distinción como Women to Watch en la Argentina es el primer premio que recibe Pauline Lozé, y por eso asegura que lo llevará en su corazón: “Estoy muy contenta, es súper importante premiar a las mujeres en el mundo laboral, sobre todo porque da a conocer modelos de éxito que son diferentes a los que siempre vemos”. Para Lozé, este tipo de premio también es importante en términos de imagen pública porque ganan espacio las mujeres, y también para que las más jóvenes “se den cuenta de que no hay razones por las cuales no podrían lograrlo”, dice.

—¿El premio que entrega L’Oréal junto a Unesco para Mujeres en la Ciencia tiene relación con esto que usted dice que las mujeres ganen espacios?
—L’Oréal está premiando a las investigadoras y es importante porque es en muchos países del mundo. Ellas investigan sobre temas muy avanzados y es algo sumamente importante para el mundo futuro. Estamos buscando la misma cosa, ayudar a las mujeres a que tengan más espacio público, para que tengan más recursos para desarrollar cosas. Una mirada diferente hace que avancemos más rápido.

—¿Cómo es el compromiso de la empresa con la sustentabilidad y con la sociedad?
—Tenemos un programa llamado Sharing Beauty with All que incluye sustentabilidad y compromiso social. A nivel corporate hay diferentes proyectos: ese es uno. L’Oréal está muy involucrado y a nivel cosmética activa este compromiso de sustentabilidad y compromiso social se traduce en Skin checke, que es acercar la dermatología al público haciendo chequeos de lunares gratuitos. Cosmética activa es una empresa de salud antes de ser de belleza: nuestra visión es que la limpieza de la piel empieza por la salud. Vichy se dedica más a cuidar la piel ya sana y saludable para ponerla en estado, y La Roche-Posay se dedica a las pieles sensibles, sirve a todas las personas con problemas de piel, hasta problemas de piel fuerte, como el cáncer de piel. Por esta razón el compromiso social es muy grande y es muy direccionado a la salud. Debemos acompañar a que la gente cambie sus hábitos bajo el sol y que comiencen a ponerse cremas. También tenemos otro programa que es Lipikar Familias para la piel atópica, que es la piel muy seca que puede llegar a generar eczemas. Dos de cada diez niños sufren este problema y se rascan para alivianar la molestia, pero llegan a lastimarse y les produce dolor. Cada año elegimos a algunas familias a las que les damos un año de producto gratis para que puedan cuidar a sus niños y no les dañe tanto la piel. También tenemos un alto compromiso con personas con cáncer, porque los tratamientos como quimioterapia y rayos dañan mucho la piel y algunos dicen que no quieren seguir con esos tratamientos porque les duelen las manos debido a que la piel de sus manos y pies se abren. Damos productos y capacitamos a las enfermeras para que ellas sepan que tenemos productos sobre los que hemos hecho estudios clínicos en pacientes que están en tratamiento de quimioterapia. Esto mejora mucho la calidad de vida.

—¿Qué representa para usted trabajar en una empresa que tiene estos valores y compromisos con la sociedad?
—Toda mi familia es médica y yo estaba viendo de ser médico o hacer una carrera de negocios. Hice administración de empresas, y había una especialización en salud y entré en L’Oréal para productos de salud. En la entrevista, el director de recursos humanos me preguntó a qué división quería ir y dije a cosmética activa y hoy diría lo mismo, porque la misión es increíble, tiene que ver con la salud y realmente me gusta la idea de poder serle útil a la gente. Me apasiona cómo podemos ayudar a personas con enfermedades crónicas a mejorar su bienestar.

—¿La gente está tomando conciencia de los daños que puede causar el sol en la piel?
—Hay más y más conciencia, pero la gente no cambia los hábitos. Hace dos años hicimos encuestas en varios países del mundo: saben que el sol es peligroso, que hay que chequearse los lunares, que hay que evitar el sol entre el mediodía y las cuatro de la tarde, pero no lo hacen. Entonces: ¿cómo hacemos para que la gente no tenga la impresión de que queremos cortarle una parte de su libertad? Es por eso que más y más tratamos de hacer las cremas lo más eficaces del mundo, para que la persona se exponga con menos peligro. Hay 95% de la gente que se pone protector solar en el verano, pero sólo el 5% en invierno. Aquí en la Argentina hay que ponerse todo el año, porque el sol te mancha la piel caminando por la calle. Todavía hay mucho por hacer. La gente debe consultar al dermatólogo una vez al año y eso se debe hacer porque con el sistema de salud que hay en la Argentina todo el mundo puede acceder a un dermatólogo.