Su nombre es Palette y es la nueva creación de la empresa japonesa Flower Robotics. Es un robot-maniquí, que está diseñado para posar y moverse como una modelo al presentar ropa, al tiempo que puede analizar las preferencias de los consumidores y presentar los resultados a los dueños de las tiendas.

Flower Robotics desarrolló el robot en conjunto con la compañía de software SGI Japan Ltd. y piensa comenzar a venderla este año a las industrias de moda y de servicios.

"El muñeco usará una serie de miradas programadas (insinuantes y atractivas) para aumentar en los consumidores el apetito de compra", dijo Matsui, presidente de Flower Robotics.

El precio de Palette no ha sido establecido todavía, pero los ejecutivos de las dos empresas involucradas en su desarrollo dijeron que quieren que esté "lo más cerca posible de los costes de los robots-maniquís convencionales".

"Hay una oportunidad de cambio en el concepto de estática que no había cambiado en más de un siglo", dijo Hiroshi Otsuka, de SGI Japón.

Además, Palette puede convertirse en una espía industrial, ya que una de sus múltiples funciones es adivinar la edad y el sexo de los compradores, e incluso, identificar los bolsas que llevan-

Como en la película

El robot debe recordar a algunas personas a la película estadounidense “Maniquí” (1987), protagonizada por Andrew McCarthy, en la que interpretaba a un vendedor de grandes almacenes que se enamora de una maniquí, quien a su vez era realmente una antigua mujer egipcia.

Sin embargo, en el caso de esta invención, el maniquí no tiene cara. "La atención de los clientes se centraría en el rostro del muñeco si lo tuviera", dijo Matsui.

Dos versiones