Publicidad > Estados Unidos | NEW YORK FASHION
Redacción Adlatina |
Uno de los encantos de Nueva York es la diversidad que se respira al caminar por las calles de la ciudad. Se escucha y hasta se puede olfatear algo de la vida de otros países. Y el microcosmos de
Y, como todos los años,
Esta nueva edición de la semana de la moda neoyorquina cerró con cambios sustanciales en el engranaje de la moda americana. Diane von Furstenberg, apoyada por la editora en jefe de Vogue USA Anna Wintour, se ha convertido en la presidenta de
Al mismo tiempo, tras el cierre de la casa Rochas, el futuro de su diseñador, Olivier Theyskens, sigue sin confirmarse y se encuentra a medio camino entre París y Nueva York. Mientras esta semana los rumores de un acuerdo entre Theyskens y Nina Ricci tomaban fuerza, la relación del creador belga con Oscar de la Renta también ha recibido toda la atención de la presa de moda.
Highlights de los principales desfiles
Calvin Klein, de la mano del diseñador Francisco Costa, presentó una interesante colección muy en la línea minimal de Calvin Klein que el mismo define para la mujer de hoy en día, que igual sale del gimnasio para irse a casa o a una fiesta.
Con un toque más sexy de lo habitual en la firma y con un protagonismo especial del volumen más fresco, Costa creó ropas con transparencias voluminosas que permiten ver la figura entallada y con un aspecto retrofuturista.
El blanco y el negro siguen protagonizando la paleta de Calvin klein, con algunas leves pinceladas en amarillo y crudo. Una colección femenina, minimalista y sutil que se compagina con sandalias y botines trabajados en cuero negro y blanco.
Por su parte, Donna Karan volcó su interés hacia la elegancia de Europa del este, que sin perder su esencia, se traslada a un universo más artístico. Sedas fluidas, linos o caftanes, envuelven la silueta femenina con una paleta de tonos incienso, sahara, petróleos o verde sobre vestidos drapeados.
Definitivamente, el calzado, que trajo grandes sandalias de grandes cuñas agujereadas de madera y un toque étnico, acorde con la nueva estética cargada de volúmenes e influencias asiáticas.
Otro de los principales diseñadores que mostraron sus diseños esta semana fue Zac Posen que ya no es aquel niño que nos sorprendía con sus colecciones hace tres años. Posen ha convertido su desfile en uno de los más esperados de Nueva York y sin duda alguna en uno de los abanderados de la Olympus Fashion Week en todo el mundo.
La noche sigue siendo su habitat natural, donde el diseñador vuelca toda su creatividad desarrollando un excelente estudio del volumen y los volantes más artificiosos. Para su nueva colección, Posen nos ha traído una extraña fusión entre la estética japonesa y el mundo subacuático de Esther Williams.
De la estética japonesa, Posen nos trae los kimonos, mientras que la influencia del mundo subacuático la traen los volantes y la estética ondulada de sus vestidos y chaquetas que también destilaban el glamour del icono cinematográfico que fue Esther Williams.
Desde tonos esmeraldas, pasando por los rojos más intensos hasta llegar a los brocados plateados, pero si algo cautivo al público congregado, fueron sus minivestidos de chiffon negro, sus blusas de organiza con mangas plagadas de capas o sus minivestidos plateados con magas de mariposa
Para el show, Posen contó con la estilista Brana Wolf, habitual de Versace, que ayudó a dar un toque de claridad al conjunto de la colección.
Sin duda un extraño universo que cautiva, pero del que es difícil identificar un target concreto.
Otro pope de la moda que dijo presente fue Marc Jacobs. Sin lugar a dudas su desfile es el que reúne más incondicionales y celebridades por metro cuadrado durante la semana de la moda de Nueva york. Presentó una colección romántica y femenina, de apariencia onírica, de cuento de hadas y estética árabe, pero con pinceladas retro futuristas.
El show era expectante, sobretodo gracias a su puesta en escena, que prometía grandes sorpresas, como en el caso de los materiales, donde se pudo ver como el tul, compartía protagonismo con sedas, celofanes, ante gastado o fibras metálicas.
Su paleta de color está protagonizada por tonos blancos, marfiles, beige, rosas y verdes pomposos, además de excelentes pinceladas en dorado y plata. Sus prendas, planteadas con infinidad de capas y protagonizadas por el cashmere tenían un toque exótico donde el volumen se complementa con las camisas más entalladas y los volantes y volúmenes se tornan protagonistas absolutos gracias a sus toques de estética árabe como sus pantalones afganos adornados con botones o sus túnicas.
Como es habitual, no faltaron celebridades como Victoria Beckham, Wynona Ryder, Demi Moore y su baby-face Ashton Kutcher, Maria Sharapova o Eva Mendes entre otros.
Para su nueva colección, Jacobs ha contado con la colaboración de Stephen Jones, colaborador habitual de John Galliano, pero si bien en Galliano su función era desarrollar la estética más surrealista de la firma, en Marc Jacobs su función está más vinculada al desarrollo de las paletas de color.
Uno de los accesorios más llamativos fueron los bolsos de la colección, algunos elaborados con piel de pitón y plagado de joyas o los de estética militar trabajados con piel de cocodrilo sin olvidar los bolsos plateados que tanto gustan a Jacobs.
Por su parte, Ralph Lauren eligió los estudios Skylight para presentar su colección primavera verano 2007 dentro de la cada vez más reconocida Semana de la moda de Nueva York. El propio Ralph Lauren comentó que su nueva colección se inspira en una marcada elegancia, cargada de sofisticación y lujo, rodeada del glamour cinematográfico para darle un toque de misterio.
¿Lo mejor? La exquisitez del vestido de noche, mezclada con toques de sastrería masculina. En primera fila se pudo ver a personajes como Kevin Costner, Lauren Hutton, Bruce weber o Diane Kruger.
El blanco y negro, emulando a las películas clásicas, protagonizaron una colección marcada por los pantalones slip line, los toques navy, los vestidos de seda y el lino como tejido invitado en una colección marcada por una reinterpretación del estilo clásico.
La colección tiene también otra vertiente en la que Ralph Lauren explora la influencia asiática con broches de diamantes diseñados por Douglas Abraham que combinan con turbantes, caftans o vestidos de plata descolorida, que deslumbraron a los asistentes mientras Lauren nos introducía mucho más en su ambiente mediante una banda sonora india plagada de sitars seleccionada para la ocasión por su hijo Andrew.
Carolina Herrera
No fue una sorpresa ver hermosos vestidos en la colección de Carolina Herrera, pero esta muestra fue un " knockout" en ajuares de gala. Trajes vaporosos de chifón -drapeados en el área del busto- y vestidos "strapless" en pálidos tonos de salmón, que develaban rayas negras a lo largo de la falda, hicieron voltear cabezas. Para el día, Herrera propuso vestidos camiseros con correas a la cintura, pantalones de pierna ancha, bermudas y falditas con tabletas y tachones.
Oscar de la Renta
La apertura de la pasarela de Oscar de la Renta fue bella y armónica, cubriéndola de aires primaverales: colorida, fresca y delicadamente femenina. Ésta fue otra pasarela en la que los vestidos fueron el foco de atención. De la Renta se encargó de darles la elegancia que lo caracteriza, jugando con el volumen, el uso de detalles -croché, variedad de bordados y "appliqués"-fruncidos, drapeados y tabletas. Entre los textiles que protagonizaron la muestra, vimos la tafeta, el chifón, la seda, el jersey y la muselina.
Gustavo Arango
La propuesta del diseñador colombiano estuvo llena de exquisitos detalles, entre ellos, ligeros volantes, alforzas y fruncidos, todos ejecutados con tanta delicadeza, que las prendas de vestir parecían flotar sobre la pasarela. En esta presentación, el diseñador se centró en la confección de vestidos y faldas en una paleta de color que incluyó, desde pálidos tonos de melocotón y gris, hasta un intenso azul marino.
Diane von Furstenberg
Los ochenta tomaron posesión de la propuesta de Von Furstenberg para la primavera. "Leggings" fucsia, estampados multicolores -inspirados en la naturaleza, con serpientes e insectos- y blusones formaron parte de esta colección en la que también se destacaron los vestidos mini y, por supuesto, el clásico "wrap around dress".
Tuleh
Bryan Bradley pareció haberse perdido en el espacio, mostrando una colección que más bien se hubiera ubicado en la moda de este otoño, que en la de la siguiente primavera. El negro y el blanco fueron los colores predominantes en una propuesta compuesta por faldas y vestidos abullonados, blusas de manga larga y pantalones de pierna ancha.
Peter Som
La muestra de 33 cambios que propuso Peter Som para la época primaveral, fue sofisticada, chic y liviana. Variedad de gasas, lino, organzas, tafeta y chifón -en tonos de gris, blanco, azul y "nude"- fueron trabajados de forma que la vestimenta exhibiera soltura. En su colección, Som incluyó pantalones cortos, vestidos "baby doll" en organdy y "georgette", guardapolvos y abrigos en "jacquard" y damasco, pantalones de pierna estrecha, así como faldas y trajes en tafeta (fruncida estratégicamente para un efecto moderno), que lograron un perfecto balance entre lo clásico y lo contemporáneo.
Betsey Jonson
Parte espectáculo, parte desfile de moda y concierto de rock, la pasarela de Betsey Johnson siempre atrae a una multitud impresionante. Pensamos que su popularidad se debe al dinamismo que siempre imparte a su propuesta, y a su carácter extravagante e impredecible. En esta colección, Johnson mostró, mayormente, vestidos cortos y coquetos -muchos de ellos tipo "babydoll"- con volantes, grandes lazos, ojetes y estampados de "polka dots" y rayas. En la pasarela también vimos "hotpants", "jumpers", pantaloncitos cortos y faldas tubo. En cuanto a piezas voluminosas, la diseñadora presentó algunos vestidos abultados -que parecían casi de quinceañera- con otros que, afortunadamente, mostraban una línea más moderna.
Monique Lhuillier
Para la primavera, la diseñadora decidió afinar la silueta sin olvidar del todo el volumen. Chaquetas militares, trajes glamorosos con el torso plisado, y vestidos de cóctel con volantes en el cuello, acentuaban la silueta de una forma sutil. Los trajes en telas como crepé de seda, chifón, organza y la tafeta contaron con detalles en pedrería en la cintura y cuello.
Bill Blass
Michael Vollbracht entiende muy bien a la clientela madura que es fiel a la casa de modas de Bill Blass. Pero, un poco de aire fresco y juvenil siempre es bienvenido. Al igual que en pasadas temporadas, Vollbracht mostró bonitos vestidos de noche en chifón y tafetán, conjuntos sastre con faldas tubo y una que otra falda abullonada. Pero, cabe señalar que justo cuando nos sentíamos desilusionados, salió a la pasarela un magnífico traje lavanda, de cuello alto y profundo escote en la espalda, que nos dejó con la esperanza de que, en un futuro cercano, veremos colecciones más modernas.
Nanette Lepore
El verde y el azul fueron los colores predominantes en la muestra de Nanette Lepore. La diseñadora inspiró su paleta de color y sus diseños en el paisaje de Venecia durante unas vacaciones. Esta muestra de Lepore estuvo llena de pantaloncitos y trajecitos cortos, perfectos para vacacionar. Para la confección de los mismos, la modista recurrió a materiales como el "jersey" y el algodón.
Michael Kors
En contra de la corriente, Michael Kors mostró una propuesta superentallada, con "skinny pants", vestidos, faldas y "tops" drapeados. Nada de bullones, tafeta o pedrería. Y es que, desde la música hasta la escenografía, Kors cautivó con un "look" sexy y estilizado, que recordó la moda de los setenta y ochenta. Las chaquetas tenían hombreras; las túnicas y blusones fueron cortos y escotados. A través del desfile, los hombros, la espalda y las piernas se dejaban al descubierto en un juego de minifaldas, escotes y el uso del "stretch jersey", tela predominante en esta pasarela.