Publicidad > Brasil | SE LLEVÓ A CABO LA SAN PABLO FASHION WEEK
Redacción Adlatina |
Nadie duda ya que Brasil es, hoy en día, el único país latinoamericano con una industria de la moda sólida y reconocida a nivel mundial, modelos internacionales y diseñadores como Alexandre Herchcovitch, quien presentó su colección en simultáneo con las pasarelas de Nueva York, montando increíbles puestas para cada desfile. En suma, en el país se invierten grandes sumas dos veces al año para poner en marcha la San Pablo Fashion Week. Y un detalle importante: este evento es la única semana de la moda que integra, junto a Nueva York, París y Milán, el calendario oficial internacional.
Desde el 12 hasta el 18 de julio se realizaron 48 desfiles de 45 diseñadores. Aunque los principales actos tuvieron lugar en la Bienal del Parque de Ibirapuera, marcas como Cavalera presentaron sus colecciones en otros escenarios, como el circuito de Interlagos, donde la marca contó, entre otros modelos que lucieron sobre el asfalto la colección masculina, con la presencia de Bruno Senna, sobrino del fallecido piloto de Fórmula 1 Ayrton Senna.
Más que un conjunto de desfiles, la San Pablo Fashion Week fue una maratón de siete días, de la cual participaron en esta ocasión 46 diseñadores, y que concitó más de 12 mil espectadores por día.
Siendo el tema principal lo africano, como tendencias claras se dedujo que el negro (combinado con el blanco o incluso con el rosa, como hizo Reinaldo Lourenzo) será el color predominante para 2007. Además de creaciones que reproducían estampados de cebra, destacaron los conjuntos recatados, frente a anteriores propuestas más sugerentes; así como las prendas aptas para todos los climas. Así, y con la vista puesta en la exportación, muchos diseñadores presentaron piezas menos tropicales y más pensadas para una temperatura estándar, en las que se destacó la profusión de pantalones, chaquetas y vestidos largos o por encima de la rodilla. En los pies, plataformas sofisticadas, como las que presentaron firmas Herchcovitch o Triton.
Los diseñadores han buscado, en general, una figura más cómoda que sexual, aunque además de la figura femenina recatada y frágil también ha irrumpido con fuerza otra contrapuesta, de carácter fuerte e inspiración marcial.
Una semana a puro furro
En la edición verano 06/07 se vieron las colecciones de diseñadores de renombre, tales como Alexandre Herchcovitch, quien esta temporada se inspiró en el Renacimiento y apostó por el negro; Rosa Cha, famosa por sus coloridos trajes de baño; el glamoroso matrimonio formado por Reinaldo Lourenco y Gloria Coelho, quienes impulsaron a su hijo Pedro Loreigo, de 15 años, como diseñador -un niño prodigio que presentó su tercera colección-. También participaron Ronaldo Fraga, a quien llaman en Brasil “el poeta de la moda”, porque para sus colecciones se inspira en cuentos; Maxime Perelmuter, con su ropa masculina ultravanguardista; e Isabela Capeto, una de las creadoras más novatas, quien con su estilo romántico impactó al público.
En Brasil, la propuesta para el verano que se viene fue unánime. El estilo africano será la gran inspiración para la próxima primavera-verano. Todo, desde el maquillaje pasando por los peinados y, por supuesto, las prendas y el calzado, estará influido por los ornamentos “femeninos”, distintivos de las tribus africanas, pero en una versión pop. Los ítems emblemáticos para la próxima temporada serán: abundancia de accesorios, estampados florales, colores vibrantes, cabellos recogidos y plagados de adornos, maquillaje recargado y delineado de ojos.
Paulo Borges, organizador de la Sao Paulo Fashion Week (SPFW), sostiene que la opción de los diseñadores por los motivos africanos es fruto de la herencia cultural brasileña. “Varios estilistas se inspiraron en África, pero todos en cosas diferentes”, lo que demostraría “que existe una total sintonía entre todos los que trabajamos en la moda”, dijo.
En la moda femenina, la inspiración africana da nuevo valor a las faldas en detrimento de los pantalones, impone la amplitud sobre lo justo, y exalta la sensualidad y la valorización del cuerpo a través de la insinuación más que de la exhibición directa, dicen los estilistas.
Tanto las prendas masculinas como las femeninas explotan en mezclas de colores, especialmente verde, azul, naranja, amarillo, rojo y blanco. Predomina el cuero tanto en el vestuario “casual” como en la moda formal; y se relega al jean a la categoría de prenda de uso cotidiano.
“Brasil es uno de los países que logra tener una mezcla racial tan diversa que (la moda) aprovecha de forma positiva y creativa”, agregó Borges.
Las escenografías de los desfiles también merecen un capítulo aparte, ya que este año se vio un despliegue envidiable. Uno de los diseñadores hizo que su desfile pareciera un autódromo, montando un taller mecánico de tres metros en horas; otro ató parte de sus diseños a globos que volaron por el aire, mostrando las distintas prendas; también se vio una pileta repleta de pelotas de plástico; otro imitó un reducto de ski; y en uno de los desfiles nevó de principio a fin.
Y qué decir de los fondos musicales que acompañaron las 48 colecciones. Rock, samba, cantos rituales, sonajas, ritmos caribeños y hasta baladas pop, en las que Dionne Warwick cantó dramáticamente a la levedad de los vestidos de fiesta, resonaron en los salones.
Además, desde Gisele Bündchen -quien comenzó a triunfar en 1999 y, hoy en día, es la modelo mejor paga del mundo- hasta modelos ya reconocidas mundialmente como Fernanda Tavares, Carolina Ribeiro, Marcelle Bittar, Carla Trentini, Adriana Lima e Isabela Fontana participaron de la semana de la moda del país.
Las principales colecciones
La San Pablo Fashion Week cumplió diez años y los festejó con una pasarela de lujo. Sus principales diseñadores, Cia Maritima, Triton, Alexandre Herchcovitch, Sais, Poko Pano, Patachou y Osklen, presentaron sus colecciones primavera-verano para la temporada que viene.
Alexandre Herchcovitch, consagrado como el máximo diseñador brasileño, mostró una vez más que lo nativo e internacional pueden fusionarse, teniendo como resultados prendas glamorosas pero osadas al mismo tiempo. Y además, su colección sirvió para demostrar que el calor dará permiso para enfatizar las extravagancias de colores vivos. Herchcovitch presentó vestidos osados en los que combinó estampas de flores con cuadros y rayas. También lo hizo en faldas vaporosas y ajustadas en la cintura.
Por su parte, Sais sigue con su línea romántica, proponiendo estampados de flores gigantes, hojas y mariposas, con profundos escotes en los trajes de baño. Las combinaciones de colores fuertes, como amarillo, rosa, lila, verde, azul y naranja predominaron en el desfile.
La marca Poko Pano también presentó sus diseños de playa, con los que propuso un regreso a la época de las abuelas, al crear piezas que cubren más y en las que se destacan los bordados, en combinación con la lycra.
Cia Maritima, como todos los años, se llevó todos los aplausos, con bikinis y trajes enteros para todos los gustos, cargados de sensualidad y alegría en sus estampados. La suya es una paleta cromática que abarca los colores vivos, acompañando los diseños más sofisticados del ciclo.
Por su parte, Liana Thomaz, diseñadora de Agua de Coco, llamó a su colección “Fardo Tropical”, en referencia a la arquitectura brasileña durante el período colonial y a una canción escrita por el músico brasileño Chico Buarque. Sus modelos se meneaban sensualmente en una pasarela llena de piñas y azulejos.
Mario Queiroz presentó su colección con una ambientación parecida a la del estado de Bahía, en la costa brasileña.
En el make-up dictó casi unánime el look de caras lavadas, con efecto mojado en los ojos. Y en el cabello, los recogidos fueron un hit. Se vieron colas de caballo y rodetes desprolijos que despejaban la cara. Las vinchas anchas y las trenzas también hicieron furor.
Un cierre con broche de oro