Publicidad > Estados Unidos | SE TRATA DEL CORTISLIM, UN PRODUCTO AMPLIAMENTE PUBLICITADO, TAMBIÉN OBJETADO POR LA FDA
Redacción Adlatina |
El ente regulador federal declaró que ha trabado juicio contra los fabricantes de CortiSlim, un ampliamente publicitado suplemento dietario, al señalar que han hecho falsas afirmaciones de su capacidad para ayudar a la gente a perder peso.
La FTC (Federal Trade Commission) acusó a las Window Rock Entrerprises Inc. de haber hecho “engañosas afirmaciones de eficacia” acerca de ese medicamento en avisos de gráfica de amplia difusión nacional, además de infomercials y mensajes online.
El juicio trabado por la FTC sostiene que las empresas también han hecho afirmaciones “falsas o sin fundamento” acerca de las virtudes de CortiStress, un producto que ya no está en el mercado, al que se lo sindicaba como un medio para prevenir o eliminar el riesgo de un amplio rango de enfermedades, entre las que figuraban la obesidad, el cáncer, la diabetes y el mal de Alzheimer. Además -se agrega en la presentación judicial- los acusados produjeron infomercials especialmente filmados como para parecer episodios de un talk show llamado “Breakthroughs”, en lugar de mostrarse como un programa comercial pagado.
El juicio, entablado el jueves pasado en una corte federal de Los Angeles, se plantea si una cantidad aun no especificada de dinero debe ser restituida a los consumidores que compraron los dos productos.
Las afirmaciones hechas acerca de CortiSlim “chocan crudamente con la realidad”, afirmó en una declaración Lydia B. Parnes, directora en funciones del Bureau de Protección al Consumidor de la FTC. “Ninguna pastilla puede reemplazar a un programa saludable de dieta y ejercicio”.
”Excesivo entusiasmo”
Marc Cullman, abogado de Window Rock, afirmó que la compañía ha firmado un acuerdo con la FTC para detener todo lo que sea “publicidad ofensiva, y que las afirmaciones de marketing que derivaron en el juicio planteado por la agencia fueron “el resultado de un entusiasmo excesivo”.
“La empresa estaba muy excitada por el nuevo producto en un área donde no tenía demasiada experiencia”, intentó justificar el abogado. A medida que Window Rock empezó a interpretar mejor los estándares del marketing con los productos, agregó, “fue modificando los avisos, aun antes de que fuera contactada por la FTC”.
Según el acuerdo con la FTC, la publicidad para CortiSlim, que hablaba en el sitio de la Web de un precio de 49,99 dólares por la medicación dispuesta para un mes, “se va a centrar de ahora en más en el estilo de vida, dieta, ejercicio, manejo del estrés, nutrición y suplementación”, dijo Ullman.
Window Rock está trabajando con la FTC para resolver temas relacionados con “afirmaciones que hizo la compañía con anterioridad” en los avisos de CortiSlim, dijo la empresa en una declaración, que recalcó que la FTC sólo había hecho hincapié en el lenguaje y el tipo de comunicación que aparecía en la publicidad del producto, y no en la seguridad del producto”.
“Solucionar esos asuntos es el mejor curso de acción para asegurar nuestra capacidad de seguir distribuyendo y vendiendo productos que benefician la salud del público norteamericano”, sostuvo el presidente de WR, Stephen Cheng.
Violaba la ley federal
A todo esto, la FDA, organismo que regula medicamentos y alimentos en Estados Unidos, ha venido tomando acciones regulatorias contra WR, al enviar a la compañía una carta de advertencia el 19 de agosto, en la que decía que Window Rock estaba “violando la ley federal al formular promesas no sustanciadas respecto de CortiSlim, incluyendo las afirmaciones de que elimina antojos y controla el apetito”.
Según el juicio entablado por la FTC, los avisos de CortiSlim hicieron afirmaciones falsas o no substanciadas de que tomando la píldora se perderían de 4 a 22 kilogramos a lo largo del tratamiento. También se dejó establecido que los avisos prometían que el suplemento era “efectivo para reducir abdomen y muslos”.
La acción judicial trabada por la Federal Trade Commission puntualiza que la publicidad de CortiSlim puso al frente la figura de un vocero, Gregory Cynaumon, y la del “creador de la fórmula” del producto, Shawn Talbott, y que los televidentes recibían la noción de que los niveles elevados de cortisol (una droga que se produce durante los momentos del mayor estrés) eran la causa subyacente de la adquisición de peso. Al reducir los niveles de cortisol –sostenían los infomercials y otras piezas publicitarias-, se producía una perdida sensible de peso con el producto, una afirmación que la FTC califica de “no probada”.
Según el ente oficial, lo preocupante de todo el proceso es “el formato engañoso de los infomercials”.