Publicidad > México | EL DGC DE S2 MÉXICO PRESENTA HOY EN EL DISTRITO FEDERAL LA NUEVA MESA DIRECTIVA DE LA ENTIDAD; ANTES, DIALOGÓ CON ADLATINA.COM
Redacción Adlatina |

Spooky, nuevo titular del Círculo Creativo: “Antes de hablar, vamos a escuchar”

Eduardo Spooky Pérez está reemplazando a Jorge Cuchí –actual director creativo de Olabuenaga Chemistri– en la presidencia del Círculo Creativo de México. El responsable creativo de la agencia que en el último Círculo de Oro se llevó dos Grand Prix (Televisión e Impresos) explicó a adlatina.com cuáles son sus expectativas para su mandato de un año, qué le falta a la creatividad de su pa

Spooky, nuevo titular del Círculo Creativo: “Antes de hablar, vamos a escuchar”
Spooky: “Tenemos que darles más dignidad a nuestras piezas a la hora de defenderlas. Todos sabemos que una pieza que es oro indiscutible, gana oro, pero también que un bronce puede ser un plata si se pelea o no ganar nada si no se pelea”.
–¿Cómo está compuesta la nueva mesa directiva del Círculo?
–Es una mesa muy padre porque todos son muy buenos profesionales y muy buenas personas al mismo tiempo. Es una buena representación de una generación que está dando la cara por la creatividad de México el día de hoy y que, junto con la generación de un poquito más arriba, le está dando una personalidad poderosa a nuestro trabajo y una fuerza al Círculo como nunca antes se había visto. Somos:
Presidente: Eduardo “Spooky” Pérez (S2 México)
Presidente suplente: Carlos “Hari”Sama (Catatonia Films)
Secretario: Luis Elizalde (Gibert Quattro)
Secretario suplente: Diego González (Terán TBWA)
Tesorero: Alberto Valladares (Cine Concepto)
Tesorero suplente: Valeria Chávez (S2 México)
Vocales: Jorge Aguilar (Leo Burnett), Adriana Ramírez (Young & Rubicam), Pepe Montalvo (Ogilvy), Saúl Escobar (J. Walter Thompson) y Lios Ribó (Saatchi & Saatchi)
Vocales suplentes: Carlos “Chuky”Lugo (Lowe), Rodrigo Barberá (Prado Sur Audio), Rubén Bross (García Bross & Asociados), Joel Jáuregui (ZonaZero) y Julieta Haro (Fire).

–¿Cómo fue elegido? Es decir: ¿hay una votación abierta, o se hace sobre una serie de precandidatos propuestos? ¿Y quiénes votan, sólo los miembros de la mesa directiva anterior o todos los socios?
–Todos los años se abre la convocatoria a que cualquier miembro del Círculo inscriba una mesa directiva formada por varios de los socios. El día de la votación se presentan las mesas que participan y se vota. Desde hace varios años, se ha presentado una sola mesa, así que la votación es a favor o en contra y si la votación es a favor, la mesa directiva queda oficialmente a cargo.

–¿Por qué supone que lo eligieron?
–Creo que coincidieron los momentos de ambas partes. El momento en que mi desarrollo profesional y mi madurez como creativo llegó al punto en que puedo representar a una asociación tan importante como el Círculo Creativo y en que una buena parte de la publicidad en México dejó de fijarse en la política de las cosas, en donde soy muy malo, y se está fijando más en los valores de las personas y en el trabajo, en donde sí siento que tengo que aportar.

–¿Hasta cuándo dura su mandato?
–El nombramiento es por un año, y juro que el taxímetro empieza a correr desde el minuto “0”.

–¿Con qué expectativas llega a este nuevo cargo?
–Yo soy muy idealista y le pongo mucho corazón a todas las cosas que hago. La verdad es que sí llego con expectativas muy altas, porque creo que es el momento propicio para que pasen cosas importantes. Por un lado, en la parte operativa, los presidentes anteriores han hecho un buen trabajo en la mecánica del festival y de otros eventos importantes en los que deberemos dar un buen seguimiento y sólo mejorar las cosas necesarias. Por otro lado, el Círculo está en un momento histórico tan decisivo como el país y como el mundo. La conciencia está más a flor de piel que nunca y la mentira no se puede sostener por mucho tiempo. Bush tuvo que salir a decir que se había equivocado ante las cámaras del mundo, al “niño verde” (presidente del Partido Verde de México) le sacan sus trapitos al sol en todos los medios de comunicación y cada vez la gente tolera menos la intransigencia y el autoritarismo con el que se acostumbraba ejercer el poder. La gente está cambiando la estructura de poder, en donde había un tirano que gobernaba de arriba para abajo, anteponiendo sus intereses sobre los de los demás y estamos entrando en una estructura de autoridad, en donde la mayoría tiene la capacidad de decidir y autorizar a quien considere mejor capacitado para encontrar el bien común o desautorizarlo si se muestra incompetente. Esta nueva estructura implica una fuerte conciencia de grupo y mucha unidad, que ya existen dentro del Círculo Creativo y de eso hoy no me cabe la menor duda.

–Está claro que el momento más importante del año, para el Círculo, es el festival de Acapulco. Pero ¿qué otras iniciativas intentará concretar en su mandato?
–No sé si está tan claro como usted asegura. Creo que el Círculo de Oro es la representación final del trabajo publicitario de un año, es nuestro espejo. Pero además de un espejo, el Círculo se tiene que volver una ventana y dejar que fluyan cosas mucho más profundas, que tienen que ver con la esencia misma de lo que hacemos. El Círculo Creativo tiene que encontrar la forma de darle valor a nuestro trabajo y el lugar justo que tienen las ideas como el motor de nuestro negocio y como la parte fundamental en la construcción de una marca. El Círculo Creativo se tiene que volver una referencia para los que quieran entender qué es lo que está pasando en México en materia de publicidad. Clientes, estudiantes, festivales, personas e instituciones dentro y fuera del país, han de tomar al Círculo Creativo como la autoridad que es en el tema. En el Círculo Creativo están hoy las personas que están haciendo el presente de nuestra publicidad y que forman parte de las agencias que están luchando por impulsar el desarrollo honesto del negocio. Ahí está la verdadera dimensión del Círculo Creativo, ese es el lugar que se ha ganado y que nos hemos ganado todos los que formamos parte de él. El festival de Acapulco es la cerecita del final.

–Y con respecto al Círculo de Oro, ¿intentará modificar algunas cosas? ¿Cuáles?
–Una de las cosas que hemos platicado con la mesa es que, antes de hablar, vamos a escuchar. Seguro que hay cosas que vamos a poder mejorar, pero antes queremos escuchar qué es lo que la gente siente después de las experiencias pasadas. No me interesa cambiar por cambiar. Aquí no hay reelección, y tampoco me estoy preparando para las elecciones de 2006; no necesito echarle un segundo piso al periférico, ni inaugurar un hospital para quedar bien. Vamos a hacer lo necesario para terminar de pulir un evento que ha sido muy bueno en los dos años anteriores.

–¿Cuál es su balance de la creatividad publicitaria mexicana en 2003? ¿Qué cree que le falta para instalarse definitivamente en las listas de premios de los festivales internacionales?
–Mi balance para la publicidad es muy duro si hablamos de la realidad. Creo que 2003 fue un año lleno de perversidad en un año electoral en que la sobre-exposición de campañas políticas a diestra y siniestra, con mensajes irresponsables, deprimieron al 60 por ciento de la gente, que no salió a votar. En el terreno operativo de la creatividad estamos en un momento clave, con una generación de creativos que ya son dueños o presidentes de sus agencias, y hay una generación debajo que está haciendo buen trabajo, respaldada también por los primeros. Y en otras agencias donde los presidentes no vienen de un extracto creativo, la comunicación y el compromiso con los creativos han crecido. Eso va a consolidar el trabajo en poco tiempo. Si me pregunta qué hace falta para consolidarnos en las listas de los festivales, voy a responder con un criterio también de festivales. Creo las dos cosas que nos faltan son: mejor trabajo y dignidad. Y nos sobra subjetividad. México, como Japón en otra escala, es la mina de oro de los festivales. Mandamos todo lo que tenemos y no hacemos un juicio estricto y objetivo de nuestro trabajo. Nos enamoramos mucho de nuestras piezas. En todos los países se hace mierda, si Estados Unidos mandara la mitad de la porquería que hace, sería el hazmerreír del mundo. Hay que ser más cuidadosos con lo que mandamos y en eso el Círculo tiene que ayudar en alguna medida. Por otro lado, tenemos que darles más dignidad a nuestras piezas a la hora de defenderlas. Todos sabemos que una pieza que es un oro indiscutible, gana oro, pero también sabemos que un bronce puede ser un plata si se pelea, o no ganar nada si no se pelea. Muchas campañas mexicanas hubieran merecido un mejor trato del que recibieron en muchos festivales. También hay que reconocer que todavía podemos hacer mejor las cosas y ponernos a trabajar.

–¿A qué publicitarios o agencias de tu país y del mundo, vivos o muertos, admira más?
–Puedo respetar el trabajo creativo de muchas agencias y personas, pero admirar, sólo puedo admirar a gente con la que he tenido trato más cercano y con los que me identifico, más allá de reconocer también su gran trabajo: Santiago Pando, Leandro Raposo y Pablo Stricker, Álvaro Zunini, Santiago Chaumont. Y le tengo un cariño muy especial a Clemente Cámara. Como agencia, definitivamente Agulla & Baccetti.