Publicidad > Europa | LA COMISIÓN EUROPEA ESTÁ CANSADA DE LA POSICIÓN FRANCESA
Redacción Adlatina |
Persiguen prohibición a publicidad de tabaco en eventos deportivos
Después de casi una década de peleas y debates, finalmente la Comisión Europea se decidió a desafiar legalmente la prohibición, regulada por una ley -dictada en 1991- que también prohíbe la emisión de comerciales de bebidas que contengan más de 1,2 por ciento de alcohol. Uno de los muchos puntos discutidos es que la ley impide la transmisión de muchos eventos deportivos extranjeros por la televisi
Una curiosa consecuencia de la prohibición francesa: en Magny Cours, circuito local de Fórmula 1, el coche de David Coulthard, que siempre lleva el logo de los cigarrillos West, es habitualmente cambiado por el nombre del piloto.Los ministros franceses se encuentran en un completo estado de pelea con los miembros de la Comisión Europea a partir de una ley sancionada en 1991.
El punto señalado en el comienzo de esta nota sobre la imposibilidad, para los canales de televisión franceses, de emitir muchos eventos deportivos extranjeros, tiene que ver con la prohibición que rige sobre los canales de emitir cualquier logotipo de una marca de alcohol o de tabaco sobre las camisetas de los jugadores o en los carteles de los estadios.
Las industrias publicitaria, tabacalera y alcohólica han hecho lobby ante la Comisión Europea durante años, para intentar aunque más no fuera modificar levemente esa situación, con el alegato de que resulta ilegal porque constituye una barrera para el libre movimiento de servicios dentro de la Unión Europea.
En los últimos días, se supo que la Comisión ha llevado el caso a la Corte Europea de Justicia bajo la carátula de “en estado desesperado”.
En declaraciones hechas al periódico británico The Guardian hace unos días, la directora de asuntos públicos de la Asociación Publicitaria de ese país, Sara Soltani, declaró: “Este es un ejemplo clásico de una ley de consecuencias no queridas y provocadas a partir del temor que impone el consumo de alcohol y de tabaco por parte de los jóvenes. Además, el verdadero grupo que el gobierno francés estaba persiguiendo en el momento de dictar esta ley ya he crecido, y la generación que la sucedió no tiene los mismos hábitos”. La Asociación Publicitaria Inglesa describió la ley francesa como “desproporcionada, injustificada e ineficaz”.