(Ad Age) – Margaret Johnson, chief creative officer de Goodby, Silverstein & Partners, dijo que ha visto cosas absorbentes en distintos lugares. “Estoy mirando el show ‘Some Good News’ (de John Krasinski) y asistiendo a los conciertos gratuitos de la Sinfónica de San Francisco los sábados por la noche, y “visitando” museos de todo el mundo, a los que nunca tuve tiempo de ver antes de esta pandemia. En suma, estoy dedicando tiempo a estar inspirada y atraer lo que espero me nutra como creativa en el futuro”.
Todo eso no significa que en la agencia, donde Johnson es una asociada, no haya cantidades de trabajos por hacer durante la crisis del coronavirus. El shop, que tiene un número de clientes que han funcionado bien y se mantienen firmes durante la pandemia –como Pepsi y ComCast- ha evitado los despidos. Utilizando las herramientas de su suite de producción en forma remota, Goodby ha producido más de 30 piezas de creatividad para el 81% de sus clientes, incluyendo a One Medical, BMW, Samuel Adams Beer y Truly Hard Seltzer.
No siempre ha sido fácil: para Panera Bread, la agencia tuvo que literalmente adiestrar a los conductores de deliveries a través de videos en sus iPhones. “Es como estar en una escuela de cine otra vez”, dice Johnson.
La creativa, en el podcast Ad Lib de Ad Age de esta semana, habló justamente de las escuelas de cine y de cómo ella comenzó en la publicidad llamando a las agencias “en frío” al romper una hoja de las Yellow Pages desde un teléfono público de Nueva York. ¿Qué les aconseja a los graduados para que encuentren trabajo? “Alcancen a alguien que ustedes han admirado en la industria y pídanle consejos”, dijo, “y notarán que un número sorpresivo de ellos va a responderles. Y no abandonen nunca: el hambriento ganará”.
Johnson también discutió la importancia de inspirar a otras mujeres de la industria y su decisión de crear campañas que resuenen en ellas. Eso incluye a un proyecto que está haciendo con su hija de 11 años para “ayudar a nuestras hijas a crear el mundo en el que ellas quieran vivir”.
Además, hay algunos otros hábitos que la creativa incorporó durante la cuarentena en su casa, como por ejemplo una obsesión por Peloton y una “grandiosa” receta de cerdo asado.
