(Ad Age) - Kristen Cavallo, directora ejecutiva global de MullenLowe, se retira de la industria publicitaria después de 30 años para seguir una carrera en política y activismo social.
La decisión se produce poco más de un año después de que Cavallo asumiera el cargo de directora ejecutiva global en MullenLowe, de IPG, mientras mantiene su título de directora ejecutiva en The Martin Agency, también de IPG.
“El año pasado hice casi tres papeles y eso me costó mucho, siento que me dieron tres años en uno”, dijo Cavallo.
Hablando desde Los Ángeles, donde acababa de dar la noticia de su retiro a los ejecutivos de MullenLowe y a los clientes de la zona, Cavallo, de 55 años, dijo que su decisión tenía menos que ver con su función ampliada y más con un sentimiento que había estado creciendo en ella durante años.
“Se trataba menos de mí en la publicidad, y más de lo divisivo que siento que se ha vuelto el mundo, combinado con lo agnóstico que siento que es la gente acerca de los candidatos, de ir a las urnas y de desempeñar un papel en nuestra democracia”, dijo Cavallo. "Y creo que ese sentimiento de impotencia o desesperanza creció y seguí sintiendo que tal vez podría aplicar estas habilidades para un fin que podría tener implicaciones de largo alcance, implicaciones diferentes a las de la publicidad".
Cavallo ya ha dado a conocer anteriormente sus aspiraciones políticas. En un artículo de Ad Age de 2022, dijo que si no estuviera en publicidad, consideraría postularse para gobernadora de Virginia.
Cuando se le pregunta a qué partido político apoya mientras mira hacia un nuevo comienzo, Cavallo responde con seguridad "Azul" y hace una pausa para reír antes de continuar. “Cualquiera que no esté intentando quitarme mis derechos o los derechos de mi hija”.
Esa es la naturaleza directa que la industria publicitaria se ha acostumbrado a ver en Cavallo, quien en ocasiones se encontró a sí misma y a The Martin Agency en el centro de debates en toda la industria, como cuando respondió a una serie de tuits en 2022 del CEO de Coinbase, Brian Armstrong, quien pareció atribuirse el mérito del anuncio de Super Bowl basado en QR de la marca en lugar de reconocer a la agencia que estaba detrás del anuncio.