(Ad Age) – McDonald’s está apostando a automatizar el trabajo de procesar las órdenes provenientes de su servicio drive-thru.
La mayor cadena de restaurantes del mundo finaliza la adquisición de la start-up Apprente, un desarrollador de tecnología de reconocimiento de voz para uso en la industria de los restaurantes, para acelerar las filas de sus clientes.
La idea es tener una máquina, en lugar de una persona, del otro lado del intercomunicador, para trasladar las órdenes al staff de la cocina. En los restaurantes del área de Chicago –donde el sistema está siendo testeado- los empleados todavía supervisan la toma de órdenes del drive-thru y pueden irrumpir en el proceso cuando sea necesario.
La adquisición es la tercera de McDonald’s en los últimos seis meses, y se ajusta al impulso de la compañía de apoyarse más firmemente en máquinas e inteligencia artificial para aumentar las ventas. McDonald’s también está utilizando los cuarteles centrales de Apprente en Mountain View, California, una localidad que es también sede de Alphabet Inc. –propietaria de Google- para arrancar con un laboratorio tecnológico, con planes de incorporar empleados en el lugar.
Steve Easterbrook, CEO de MCD, dijo: “Creemos estar en el lugar justo para construir nuestra capacidad y tener una mayor presencia en el Silicon Valley”.
McDonald’s ve cómo Apprente, que tiene menos de 20 empleados, ayuda a movilizar los autos en el carril del drive-thru más rápidamente y tomar órdenes con más precisión que los empleados. La compañía también está invirtiendo para agregar apps de órdenes y quioscos en sus restaurantes y en displays de menúes digitales.
En Estados Unidos las compañías de fast-food están buscando obtener ventajas en medio de una intensa competencia. Aunque muchas cadenas han tenido robustas ventas este verano, una buena parte de ese crecimiento se ha debido a los altos precios y nuevas locaciones, en lugar mejoramientos en el tráfico. Aunque en el último trimestre McDonald’s informó de una superación del 6,5% en las ventas de iguales locales –su mejor resultado en siete años-, el cálculo de gastos por persona se mantuvo bajo en Estados Unidos.
Fundada en 2017, Apprente afirma que su tecnología puede interpretar con certeza el lenguajes conversacional, como por ejemplo un cliente que ordena una hamburguesas sin cebollas y con cantidad extra de salsa. McDonald’s ya está testeando la tecnología en dos locaciones del carril de drive-thru, que compone alrededor del 70% del negocio de la compañía, y planea desarrollar la tecnología de Apprente a nivel nacional, dijo Easterbrook. El directivo predijo que esto tendrá “un impacto positivo en más de la mitad de nuestros consumidores”.
Meses atrás, McDonald’s gastó 300 millones en Dynamic Yield, una firma que ayuda a los minoristas a mejorar su performance al coleccionar data personal de consumidores para ajustar los pitches de ventas y promociones. La cadena utiliza herramientas de Dynamic Yield para sugerir comidas y bebidas a los comensales, basándose en ciertos factores como el horario del día, el clima y el tráfico.
En abril, MCD adquirió una pequeña cantidad de acciones del Plexure Group, que desarrolla apps de mobile.
McDonald’s, que declinó revelar los términos del acuerdo, puede expandir el uso de la tecnología de Apprente fuera de Estados Unidos. La compañía quiere asegurarse de que ella puede funcionar con diferentes acentos, como por ejemplo en Australia y el Reino Unido, y también trabajar con otros idiomas además del inglés, dijo Easterbrook. “Nos gustaría desarrollar un segundo lenguaje muy rápidamente”, dijo. “Vemos eso como una solución global”.