(Ad Age) – Walmart está haciendo que todos los productos del hogar lleven etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID) a partir de septiembre, y prevé ampliar el criterio a más categorías, en una importante expansión de una tecnología de seguimiento que parecía casi desaparecida hace algunos años.
La adopción total de la RFID por parte del mayor minorista de Estados Unidos introduce nuevas categorías de productos a la llamada "Internet de las cosas". Con el tiempo, esto podría generar nuevas capacidades de marketing, análisis e investigación, sobre todo para estudiar el comportamiento en los locales.
Pero por ahora el objetivo es mejorar la eficiencia de la cadena de suministro de Walmart, facilitando el seguimiento de los artículos en todos los locales, lo que se ha convertido en una preocupación mucho mayor a medida que crecen los negocios de recolección y entrega de Walmart+. Los clientes de cualquiera de estos servicios pueden dar fe de que es habitual que la aplicación o el sitio Web de Walmart muestren artículos en stock y listos para su entrega en los locales cuando en realidad no lo están, lo que lleva a sustituciones de última hora y a veces provoca cancelaciones u obliga al minorista a cumplir con las entregas gratuitas que están por debajo de los mínimos de los pedidos.
El sube y baja de la RFID
La RFID fue una tecnología muy publicitada a principios del milenio, pero desde entonces ha venido siendo eclipsada en muchos terrenos, desde los teléfonos inteligentes hasta los códigos QR. Walmart y algunos de sus proveedores, como Procter & Gamble Co., impulsaron en su momento proyectos piloto de RFID como una forma de hacer un seguimiento del inventario, reducir los robos y recortar los costos. Pero la idea se desvaneció bajo el peso de los elevados costos de los lectores de chips que se usan para su seguimiento.
Sin embargo, en los últimos años el costo de los chips RFID ha disminuido un 80%, hasta situarse en unos 4 centavos, según un informe reciente de McKinsey & Co. Y las preocupaciones sobre la privacidad que manifestaban hace años los críticos -incluida la amenaza teórica de que la gente sea rastreada por los chips RFID en sus productos- se han desvanecido, porque la gente es rastreada rutinariamente a través de los teléfonos inteligentes, las cookies y otros identificadores digitales.
En una nota reciente dirigida a los proveedores, Walmart afirmó que el año pasado implantó las etiquetas RFID en la ropa y que ahora las está aplicando en los artículos para el hogar, incluidos los productos de cocina y comedor, la decoración del hogar, el baño, la ropa de cama, los muebles y demás ítems.
Todos los productos para el hogar de Walmart deberán estar etiquetados con RFID antes del 2 de septiembre. Walmart organizará un seminario Web de formación el mes que viene en colaboración con el Laboratorio RFID de la Universidad de Auburn y GS1 US, la organización sin fines de lucro que supervisa los códigos UPC y otras normas industriales similares, para cubrir los requisitos técnicos.