-¿A qué apuntan con la nueva presentación en sachet?
-En la misión de la marca siempre estuvo la premisa de desarrollar un producto para todos y si bien Levité es una marca multitarget con el sachet buscamos acercar al producto a la base de la pirámide, donde no teníamos una presencia tan fuerte y donde creemos que hay una oportunidad de crecimiento muy grande. Históricamente Levité trabajó muy fuerte la innovación desde los sabores y este año decidimos sumarle un trabajo muy importante en la creación de nuevas propuestas de formatos. Con este objetivo, desarrollamos el envase de 300 cc para la compra “on the go” y también pasamos de la botella de 500 a 600 cc, ofreciendo un 20% más al mismo precio.
-¿Con quién van a competir?
-La competencia para Levité son todas las bebidas con sabor, pero en el caso puntual de la base de la pirámide los principales rivales son los jugos en polvo y las b-brands de gaseosas y de aguas saborizadas.
-¿Hay una preocupación de las marcas por ofrecer presentaciones más accesibles en tiempos de crisis?
-En nuestro caso, si bien se trata de una marca relativamente nueva, que recién está cumpliendo diez años, sabíamos que teníamos una deuda pendiente que era desarrollar presentaciones para acercar el producto a más gente y creemos que con el sachet estamos avanzando con este objetivo.
-¿La nueva presentación va a estar disponible en todos los sabores?
-No, de entrada estamos trabajando con pomelo, naranja y manzana, que son los tres sabores que nosotros definimos como mainstream, porque son los más demandados y representan el 70% de nuestras ventas.