─¿Qué representa el oro recibido en Latam Effie?
─Un Latam Effie de oro es el resultado de grandes resultados, así de simple. Es por eso que esta estatuilla es bastante valorada por la industria. De hecho, me gusta pensar que el Effie pone punto final a una historia y te permite cerrar el libro con una sonrisa, un libro que te cuenta la historia de la relación de una marca con el consumidor.
─¿Cuáles eran el brief y el objetivo?
─Lo que se buscaba era una campaña que siguiera educando sobre los beneficios de los envases retornables para, de esta manera, seguir ganando penetración y lealtad en la categoría. El gran reto era que se debían tocar diferentes puntos en la comunicación:
1. Construir sobre el hábito de llevar tu botella retornable a la bodega.
2. Mostrar la conveniencia del envase: sólo pagas por el contenido y, por ende, es una compra smart.
3. Mostrar que el envase retornable te permite la intercambiabilidad: llevas un envase de Inca Kola y te llevas una Coca-Cola en el mismo formato.
4. Mostrar la resistencia de un plástico liviano del envase retornable de dos litros.
El reto era comunicar todos estos mensajes de una forma entretenida, que realmente llamara la atención del consumidor y lo motivara a utilizar los envases retornables.
─¿A qué le atribuyen el éxito del caso?
─Siempre definimos que al consumidor debíamos entretenerlo y por eso, a lo largo de la campaña, manejamos un storytelling variado, con diferentes personajes: las botellas que hablan. De esta forma abordábamos los requerimientos del brief de una forma fresca y natural. La narrativa de la campaña se basaba en que cada vez que una botella retornable regresaba a la bodega (minimarket), tenía algo nuevo que contar, porque sus vidas son como las de los marineros, llenas de viajes en los que van y vienen y en cada puerto hay una nueva experiencia, un nuevo aprendizaje. Ese enfoque nos permitió mantener una campaña ágil y entretenida.
─¿Cómo fue o es la relación entre agencia y anunciante?
─El cliente siempre confió en nuestro planteo y esto, por rebote, provocó que los procesos se volvieran ágiles y eficaces. Siempre el éxito de una campaña va a depender de cuán de la mano se muevan cliente y agencia a lo largo de su desarrollo.
