¿Cómo es el trabajo en equipo entre ustedes?
Mariano Gamba y Rodrigo Greco: Afortunadamente ya nos conocíamos desde antes de empezar a trabajar los cuatro juntos, incluso habíamos coincidido en algunas agencias. Eso nos facilitó mucho la dinámica inicial, ya teníamos buena onda, y mucho respeto y admiración por el trabajo de ellos. Son divinos. Y en cuanto a la dinámica diaria, nos ordena orgánicamente. Hoy en la agencia hay una gran cantidad de proyectos espectaculares, así que nos repartimos. No necesitamos estar todos en todo, porque confíamos mucho en ellos, y viceversa.
Celeste Dalairac y Julián Tachella: Tal como dicen los chicos, nos dividimos el trabajo con criterio y sentido común. Greco y Gamba, tienen una relación mucho más consolidada con algunos clientes mientras que nosotros, por haber vivido afuera, naturalmente tomamos proyectos más globales, pero no hay una división de clientes ni nada por el estilo, lo vamos decidiendo según el proyecto y la disponibilidad de cada uno. La verdad es que es un placer ser cuatro, y hay tantos proyectos dando vueltas que sería imposible de otra manera.
¿Cómo está cerrando 2023 para Isla?
Gamba y Greco: Honestamente, sentimos que faltan como seis meses para cerrar el año. Hoy estamos con varios proyectos que están a días de salir, YPF, H2oh! Gatorade, y Epson, entre otros. Y al mismo tiempo, estamos comenzando nuevos proyectos que nos llenan de entusiasmo, Flamin Hot, Netflix, Sabritas, y más. Pero bueno, si tuviéramos que sacar una conclusión, definitivamente, fue el mejor año de la agencia. No tenemos dudas. Sumamos nuevos clientes, nuevos proyectos con los que ya teníamos, crecimos en talento en todas las oficinas. Hicimos campañas como: La chingada, Negacionistas, Gallinas de Doritos, Gran escape con Shakira, Bobot, Sudar es la gloria, y muchos más. Somos la agencia que queremos ser, una agencia con trabajo real para grandes marcas, sin bullshit festivalero. Y sentimos que la industria valora mucho eso. Nuestro foco está en el negocio de los clientes, y si eso se traduce en un premio, bienvenido. De hecho, acabamos de ganar un Grand Prix en el Clio con Bobot, de Netflix. La satisfacción es a otro nivel.
Dalairac y Tachella: Con muchísimo trabajo, sin dudas y sumamos a todo lo que dijeron los chicos que también terminamos el año con algunas incorporaciones nuevas, de gente muy talentosa (y amiga), que nos llenan de orgullo y de alegría.
¿Qué oportunidades sienten que tuvieron en términos creativos junto a sus clientes?
Gamba y Greco: Al ser una agencia que tiene claro el norte del negocio y la dinámica de trabajo, los clientes confían mucho en nosotros. Y al mismo tiempo nos exigen cada vez más. Entre todos vamos levantando la vara sin buscar soluciones mágicas ni atajos. Esa confianza se nota en los trabajos que fuimos haciendo y que estamos por hacer. Ok, a Negacionistas, de Flamin Hot, le fue tremendamente bien, pero ¿qué sigue? Ese desafío es espectacular. Ellos y nosotros queremos ir por más. Por mejores ideas y mejores resultados.
Dalairac y Tachella: La verdad es que cada brief es una oportunidad creativa, hasta ahora no hay uno que nos haya parecido malo. Tenemos la suerte de tener buenos clientes, a los que les gusta la creatividad, que se preocupan por el negocio pero también por el craft, que aprueban guiones que testean bien con consumidores y que buenos directores quieren filmar. Pero ahora nos sumaron un desafío nuevo, los clientes quieren premios, y a nosotros nos motiva un montón que el pedido venga de ellos, que sea real versus tener que ir a vender ideas de festival que nadie necesita.
¿Cómo se ve afectada la creatividad (o las posibilidades de desarrollar creatividad) en contextos de incertidumbre como los que se vivieron este año (más allá de lo que pasa en la Argentina)?
Greco y Gamba: Argentina es un caso aparte, ¿no? Lo bueno, entre muchas comillas, es que estamos muy acostumbrados a la sucesión infinita de crisis. Llevamos la incertidumbre en nuestro ADN, y eso hace que tengamos el termómetro social de lo que le pasa a la gente, más certero. Saliendo de nuestras fronteras, seguramente la incertidumbre no pasa tanto por lo económico, pero existe y es fluctuante. Todos estamos en un proceso de aprendizaje constante sobre diferentes problemáticas culturalmente profundas, y ahí la incertidumbre es inevitable. De qué puede hablar una marca, de qué no, y cómo. Habría que ver caso por caso. Pero hay que ser muy profesional y respetuoso. Y no todos lo son. Cada tanto aparece una marca/agencia hablando de algo que no, y eso es pésimo para la industria.
Dalairac y Tachella: Creemos justamente que de eso se trata la creatividad, de saber a quién le estamos hablando, que le está pasando, cuál es la tensión en ese momento determinado y cómo podemos desde nuestro lugar, resolverla. Cuanto mayor es la crisis (o la incertidumbre) más creativo hay que ser para llegarle a gente que a la vez está con mil cosas en la cabeza.
¿Qué proyecciones tienen para 2024?
Greco y Gamba: La vara está cada vez más alta y ambiciosa. Obviamente, la idea es seguir creciendo de la mano de los clientes que ya nos acompañan, y sumar nuevos clientes en las tres oficinas de la agencia. Siempre poniendo el foco en el negocio y el talento interno. Estamos consolidando todas las áreas de la agencia para que eso suceda, digital, creativa, de producción, todas. Cada día más clientes quieren ser parte del mundo Isla, porque valoran y admiran nuestro modelo de agencia. Básicamente, vamos por mucho más.
Dalairac y Tachella: Crecer en todo sentido, sin que Isla deje de ser Isla, creemos que es nuestra responsabilidad también seguir construyendo lo que Marian, Ari y Rodri vienen haciendo, una agencia feliz.
