Fue tu primer Cannes desde que asumiste tu posición global en Grey. ¿Con qué expectativa vino? ¿Cómo vivió esta intensa semana?
Ya pasó un año de mi llegada a esta posición global; increíble cómo pasó el tiempo. Fue un primer año de muchísimo trabajo, de aprender un montón y de trabajar con diferentes oficinas del mundo y culturas al mismo tiempo: de aprender a conocerlos. Teníamos expectativas con ideas y trabajos que nos gustaban mucho y por suerte podemos decir que fue un gran año otra vez.
Está claro que al inscribir un trabajo uno espera tener un buen resultado. Pero ¿imaginaban lo que pasó con casos como el de Circus Grey?
Cannes es siempre un poco una lotería, donde hay cosas que uno cree que van a ganar y no ganan. Sabíamos que teníamos algunos casos fuertes como Sightwalks de Perú o el trabajo que hicimos en modo borderless con Ecuador, Argentina y Brasil con la promo para el arroz Super Extra. Había también un caso que a mí me gusta mucho de Croacia. Ahora viendo un poco todo lo que pasó, siento que fue un gran año, sobre todo poque volvimos a ganar un Grand Prix, después de siete años, eso me pone contento. Además, subimos al escenario todos los días, algo bastante difícil de lograr en Cannes.
Por or lado, este fue el año en el que construimos este global creative team, con Gabriel Schmitt (CCO global), Maru Sokolowski (global head of creative excellence), Constanza Rossi (global head of craft), Emiliano Alvarenga (global producer) y Catrina Cosculluela (project manager global). Un equipo global que se fue metiendo en los trabajos, en algunos desde el principio, en otros ayudando a que crezcan mejores y que las cosas pasen.
¿Cómo es el aporte que hacen desde la región y desde este equipo global para que las cosas pasen? ¿Dónde ponen el foco?
Sightwalks de Perú es un caso que nos llevó muchísimo tiempo y esfuerzo, la idea tiene más de dos años y tuvo que pasar por muchísimas instancias gubernamentales con el municipio y con el cliente, el aprendizaje con las personas no videntes y la construcción real de todo el lenguaje. Cuando logramos instalarlas el año pasado, se empezaron a romper, entonces tuvimos que levantarlas todas y volverlas a hacer para asegurarnos de que sea algo realmente duradero y sostenible. La idea ahora es que se siga expandiendo a otros municipios que ya están en trámite de aprobaciones para instalarlas y ojalá siga creciendo hasta que sean adoptadas en otros lugares del mundo. Es algo que siempre estuvo ahí y con un pequeño aporte se puede lograr un impacto muy positivo en el día a día de estas personas.
Este año también participó como jurado de la categoría Sustainable Development Goals. ¿Cómo fue la experiencia?
Estuvo buenísimo, fue un jurado muy diverso. Había gente de agencias, de clientes como la global de Unilever y de Mastercard y también alguien de la ONU, así que se dieron discusiones muy inspiradoras y de mucho aprendizaje que no me había pasado antes en otros jurados, justamente por la diversidad y el seniority de la gente que estaba ahí.
Es una categoría muy diferente y, como nos decía Gustavo Lauria como presidente, lo importante es que fueran trabajos reales, grandes ideas y además escalables a todo el mundo para generar un impacto real en la sociedad. Entonces uno vota con otro tipo de mirada y responsabilidad sobre lo que hacemos.
Fueron dos días muy buenos y de mucha información y de entender cómo esta industria también puede ayudar a hacer el mundo un poco mejor.
¿Qué cosas le llamaron la atención en el festival?
Ir todos los años y ver esas ideas increíbles que ganan y que te sigan dando envidia me da la pauta de que, primero, me sigue encantando esta profesión; segundo, que todavía se pueden seguir haciendo cosas en esta industria que tengan que ver con trabajo famoso y efectivo todo el tiempo y en todos lados.
También veo que la inteligencia artificial ya empieza a ser parte del juego, hoy leía la nota de ustedes que decía que casi el doce por ciento de lo que se vio en el festival tenía la IA como recurso y me imagino que va a seguir creciendo.
Me gusta también que Entertainment se vuelva fuerte y me gusta seguir sentándome en la ceremonia del viernes y ver qué ganó en Film, porque esa capacidad de seguir contando historias es algo que esta industria no debería perder. También seguir viendo al festival como el resultado de lo que hacemos todos los días tratando de solucionar los problemas de negocio y de comunicación que tienen nuestros clientes. Esperemos vernos ahí todos de nuevo el año que viene.
¿Cuál es el presente de Grey en Latam? ¿Qué sigue de acá en adelante?
Latam tuvo un muy buen año en Cannes, todas nuestras oficinas ganaron y eso es un montón. Pero ahora mi rol ya no es solo Latam, es global y mucho tiene que ver con poder expandir todo esto que se vinimos construyendo desde hace años en Latam hacia el resto del mundo. Ese es mi desafío para el futuro y lo que se viene, ojalá lo podamos hacer.