Es una de las Leading Women Argentina 2022 y asegura: “Esta distinción es un gran honor, y aún mayor es  poder compartirlo con grandes mujeres de este año y de años anteriores, mujeres que admiro sin dudas y con muchas de las cuales he tenido la oportunidad de recorrer este camino juntas, aprendiendo, acompañándonos, y encontrando en ellas ejemplos a seguir”.
Para Kaplan, este reconocimiento es la oportunidad de mostrarse auténticas, con sus aciertos y a veces no tanto: “Es demostramos que es posible seguir una carrera, perseguir nuestros sueños, reconciliarnos con las decisiones tomadas y no tener que encasillarnos en un rol. Ser libres de elegir, sin miedos, sin culpas, sin un mandato, sólo el de disfrutar el recorrido. Ser mamá, esposa y profesional a la vez, pero también hija, amiga, compañera, todos en una, buscando ese equilibrio que nunca es fácil: si así lo fuera, no seríamos mujeres”.

―Estudió abogacía. ¿Considera que puede aplicar ciertas cuestiones aprendidas en esa carrera a su trabajo actual?
―Estudié abogacía cuatro años de mi vida. En ese recorrido encontré esta profesión, la publicidad, por casualidad o causalidad, nunca entendí bien, pero sí entendí que la amé y la amo desde el primer día, hace veinte años. Un día, un consejo de una jueza que era mi profesora en ese momento me dio el empujoncito que necesitaba para romper con el mandato y probar algo nuevo. ¿Qué puedo aplicar? Ese gran consejo que me guardo, pero que me dio las fuerzas para tomar las riendas de mi vida y seguir lo que mi corazón me decía.

―En una columna que escribió para Adlatina, en mayo de 2021, afirmó: “Las marcas se definen por las experiencias que dan, por cómo hacen que la vida de las personas sea mejor, más fácil, más ágil y más simple”. ¿Cuál es la propuesta desde Wunderman para llevar a cabo esta premisa?
―Inspiramos crecimiento para accionar sobre el mundo con impacto humano: ese es el propósito de nuestro trabajo. Como personas que vivimos en mundo que cambia cada día, tenemos que pensarnos no sólo como comunicadores, sino como socios de nuestros clientes, esas grandes marcas, apelando a una conciencia más amplia en que el propósito y la experiencia que vivimos y hacemos vivir en cada una de nuestras interacciones. Con ellas, si lo hacemos bien, quedará una huella para seguir construyendo un lugar para vivir más abierto, más equitativo y más justo. Creemos que el poder de la combinación de datos, tecnología y creatividad nos impulsa a pensar cada proyecto como una forma de potenciar estas experiencias. En definitiva, como decía en esa misma nota, hoy las empresas compiten contra la última mejor experiencia que tuvo una persona con cualquier otra marca. Ese sentir como personas es a lo que apelamos.

―¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?
―La pasión: creer que se puede, todos los días, un poco más. Aprender de los demás, cocrear en cada paso. Poder contagiar a todos con esas ganas de querer hacer más, distinto. Tuve el privilegio de crecer junto a una compañía que me enseñó y me dio el espacio para desarrollarme respetando mis valores. Wunderman Thompson es el lugar que elijo y sigo eligiendo todos los días, lo mismo que mis compañeros, los equipos y todas las personas que forman parte de ella. Y todo esto llevado al negocio pudiendo aportar una solución inspiradora sin importar la necesidad. Y desde las personas que lo hacemos, nuestro talento, hacer posible un espacio donde desarrollarnos al máximo sin importar la disciplina.

―Wunderman está haciendo mucho foco en temas de inclusión y diversidad. ¿Qué piensa al respecto y qué rol cumple su área en base a ello?
―Una persona con algún tipo de discapacidad se siente tal cuando no puede usar un producto o un servicio, o no se ve reflejada en ningún mensaje o comunicación. No es integrar, sino incluir. Yo lo vivo todos los días, desde mi experiencia personal, en mi familia, y creo de verdad que tenemos la oportunidad cada uno, desde el lugar que ocupamos, de ayudar a crear un mundo más inclusivo y accesible. Por suerte estamos más abiertos, miramos con los ojos más grandes, y esto nos permite lograr un entendimiento más profundo de las personas y el contexto en el que se mueven, en todas sus dimensiones y complejidades, para construir relaciones más humanas. Falta mucho, hay mucho por hacer. Lo importante es entender que tenemos mucho naturalizado y que las buenas intenciones no alcanzan. Hay que capacitarse y tomarlo en serio. Evitar el oportunismo. Se trata de lo que hacemos todos los días: todo construye. Tratando de acompañar cada paso porque, en definitiva, no tendremos la seguridad del éxito, pero si logramos resolver, visibilizar y generar un cambio positivo, cumpliendo los objetivos propuestos y dándoles a las personas esa opción, esa inspiración, eso ya será un éxito.

―¿Cuáles creen que serán las palabras clave este año en el mundo publicitario? ¿Por qué?
―Muchas. Metaverso y todo el nuevo mundo que nos abre, end to end, last mile, full funnel, social commerce, mundos híbridos, personalización, diversidad, inclusión, perspectiva, sostenibilidad y puedo seguir. Si miramos de cerca todas y cada una de estas palabras hoy son nuestra realidad como personas: porque sentimos, cambiamos y evolucionamos.

ELIANA KAPLAN | BIO
Tiene veinte años de experiencia en atención a clientes en agencias de publicidad y trabaja en planificación estratégica, en organización y en desarrollo de negocios con habilidad en marketing digital y tecnologías. Estudió abogacía en la UBA y publicidad en la UCES y realizó programas de desarrollo en liderazgo en el IAE y en WPP Maestro. Comenzó su carrera en distintas empresas de comunicación: entre ellas, Bridger Conway. En 2007 se unió al staff de Wunderman Thompson, donde tuvo los cargos de ejecutiva, supervisora, directora y grouper y llegó, en 2017, a dirigir el departamento de cuentas. Recibió premios y reconocimientos a escala local, regional y global y trabajó para grandes clientes y marcas. Hoy es chief growth officer en la oficina de la Argentina y lo que más disfruta es ser la mamá de Tomi.