Imaginar, en el año
La escena más recordada es la protagonizada por Cruise moviendo y seleccionado imágenes con la mano en una pantalla holográfica. Todavía queda tiempo para las pantallas holográficas, pero ya se está trabajando en ello. Pero el concepto de manipular imágenes con la mano ya está inventado y es obra de Bill Gates y Microsoft.
Un mundo lleno de posibilidades
Windows Tablet fue el primer acercamiento masivo a los ordenadores táctiles dentro de un entorno familiar y extendido como es el propio Windows. Aún así, necesita un lápiz para que la pantalla táctil pueda entender el mensaje correctamente, como ocurre con las PDA, y sólo es posible realizar un movimiento a la vez.
Microsoft Surface va mucho más allá de todo eso. Internamente utiliza un motor Windows Vista mejorado, pero lo que realmente permite es una interacción entre el ordenador y el usuario de una manera física muy natural. El mejor ejemplo es la transferencia de archivos. Posiblemente, la tarea de transferencia de archivos que más se utiliza a nivel doméstico es pasar fotos de la cámara digital a la computadora. Surface, gracias a la tecnología Bluetooth, permite colocar la cámara encima de la superficie del sistema y automáticamente se cargan las imágenes en el escritorio.
Y lo bueno es que la cámara no se caerá porque Surface no está diseñado al modo tradicional, sino como una mesa plana. Una de las razones de este diseño es que uno de sus argumentos de marketing es tratar el producto no sólo como la interacción entre una persona y la máquina, sino entre varias personas contra la máquina. Imagina el Monopoly en versión virtual, sin objetos físicos, sino imágenes, pero jugando como siempre. A los juegos de mesa tradicionales, incluidas las cartas, les ha llegado un serio competidor.
El único problema es que la computadora parece ser la bomba para la casa, ideal para la familia para jugar con él, navegar por Internet, pero todavía no está disponible en el mercado doméstico.
Como le ocurrió al ratón que se inventó en los años 60 pero hasta los 80 no se utilizó de forma masiva, la tecnología que aporta Surface es muy innovadora y muy cara. De momento, estos aparatos se verán en hoteles o colocados como puntos de información en aeropuertos, estaciones, museos, etc. Es necesario para que esta tecnología vaya asentándose y mejorándose hasta que llegue su fabricación a escala masiva y aparezcan sistemas Surface más baratos. Pero lo mejor de todo es que será el primer paso que seguirán otros fabricantes, ya sea pagando royalties a Microsoft por uso de su tecnología, o desarrollando nuevos métodos de interacción.
Lo que está claro es que la informática le está declarando la guerra al ratón y teclado tradicionales. Cuando se consigan aplicaciones que reconozcan la voz de cualquier persona sin entrenamiento, las computadoras de la ciencia ficción se harán realidad.
Una nueva relación
Bill Gates ha dicho muchas veces que la industria del hardware ha constreñido el desarrollo del PC debido a su incomprensión del "interfaz natural".
Microsoft investigó durante años otras formas de relación entre usuario y máquina. Ahora, por fin, parece pensar que tiene entre manos un producto con potencial de mercado. Partiendo del precio inicial de 7.000 euros, el ordenador táctil queda por ahora confinado a unas pocas aplicaciones de gama muy alta, demasiado alta. A diferencia de las pantallas táctiles que llevan, por ejemplo, los cajeros automáticos, en las que el dedo activa una trama de diodos, la pantalla del Surface no es realmente sensible al tacto: una serie de cámaras y sensores reconoce lo que toca la superficie.
En este nuevo producto la clave es la interfaz. A partir del contacto se produce la interacción, equivalente a lo que en un PC convencional se consigue introduciendo instrucciones con el teclado o el ratón. El Surface reconoce los movimientos de los dedos o el de accesorios con forma de pincel o lápiz, sobre su pantalla horizontal de
El sistema identifica los objetos físicos que llevan una etiqueta electrónica, un código de barras sofisticado. Según se puede apreciar en el vídeo de demostración (www. microsoft. com/ surface), cuando se apoya una copa sobre la superficie horizontal, el ordenador interpreta que el usuario quiere consultar la carta de vinos: ésta aparecerá en la pantalla, clasificada y con recomendaciones de expertos. El sommelier electrónico no es más que una curiosidad pueril comparada con la posibilidad de descargar fotos desde una cámara digital o un teléfono móvil, para clasificarlas, manipularlas y luego almacenarlas o transmitirlas.
Se han anunciado para este año tres aplicaciones: 1) en los casinos de Harrah´s, en Las Vegas, los clientes podrán reservar mesa y entradas para espectáculos; con el tiempo, podría funcionar como mesa de juego electrónico; 2) ciertos hoteles de la cadena Sheraton experimentarán con la automatización de funciones rutinarias del conserje, y 3) las tiendas del operador T-Mobile en Estados Unidos lo usarán a modo de expositor virtual de teléfonos móviles. Microsoft podría licenciar la tecnología para aplicaciones en hospitales.
Jackie Fenn, analista de Gartner, piensa que se trata de un "cambio de paradigma", algo que la industria ha buscado durante décadas y que resulta posible gracias a las características del sistema operativo Vista. Michael Gartenberg, de Jupiter Research, encuentra relaciones con Star Trek antes de predicar que Surface indica por dónde evolucionarán los ordenadores. Por otro lado, Bill Buxton, investigador de Microsoft, reconoce en su blog la deuda del equipo con los trabajos seminales de Philips y Toshiba, entre otros, en torno al concepto de tacto múltiple. Por otra parte, HP comercializa un ordenador táctil (Touchsmart IQ770), de formato convencional y pantalla vertical; el año pasado mostró su prototipo Misto, llamativamente parecido al de Microsoft. Apple, que dentro de unas semanas lanzará su móvil iPhone, con pantalla táctil, adquirió las patentes de Fingerworks, y no se puede excluir que la misma tecnología aparezca pronto en algún miembro de la familia Mac.