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PESE A LOS RECLAMOS DE GRUPOS MUSULMANES, LA BBC NO DEJO DE EMITIR EL PROGRAMA

Muestran en una serie de TV cómo adoctrinan a jóvenes suicidas

En un capítulo de la serie Spooks se muestra a un líder radical musulmán instruyendo a un joven estudiante a realizar un ataque suicida contra una escuela de Birmingham. Emisiones anteriores ya habían despertado agresiones y roces en esa ciudad, tomando como blanco a personas de esa religión. Entidades musulmanas reclamaron en vano el levantamiento del capítulo, que ya se había adelantado en breve

Muestran en una serie de TV cómo adoctrinan a jóvenes suicidas
Una escena de Spooks que trajo repercusiones tiempo atrás: una agente del M15 es descubierta y llevada a la muerte.
Anoche, los televidentes británicos pudieron ver -tal como estaba previsto- el segundo capítulo de la serie Spooks, pese a que distintos grupos musulmanes solicitaron en los últimos días a la BBC el levantamiento del programa. En ese capítulo, se muestra a un instructor de esa religión mientras le explica a varios niños en una mezquita cómo convertirse en bombarderos suicidas. Uno de los jóvenes es preparado para atacar de esa manera a una escuela de Birmingham, ciudad que es el eje del argumento. Un agente de inteligencia (M15) está infiltrado en el grupo e informa a las autoridades que un ataque es inminente, pero luego es descubierto y asesinado por los terroristas. Los grupos religiosos habían llamado a la BBC para detener la emisión del programa por el canal BBC1, después de haber visto, la semana pasada, avances del capítulo en el canal digital BBC3. En un comunicado, el Muslim Council of Britain (MCB) señaló que personas de ese credo ya habían sido “señaladas” por causa de ese programa, e indicó que los efectos serían “mucho peores” si el capítulo saliera finalmente al aire, como efectivamente ocurrió anoche. Sophia Desai, vocera del comité, tras aludir a algunas agresiones ya producidas, dijo que temía que “como resultado de este programa sean atacados más musulmanes, especialmente mujeres que utilicen el velo en la cabeza. Pero la BBC se niega a considerar seriamente nuestras advertencias”. El episodio fue escrito por Howard Brenton, autor de las piezas teatrales The Romans in Britainy The Churchill Play. Ambas despertaron controversias en el momento de sus estrenos. “La BBC será responsable” El MCB señaló que el canal estatal “será responsable por cualquier ataque que se produzca contra individuos o centros islámicos y mezquitas” en el territorio británico. Ya se habían producido algunos hechos de violencia antes de la emisión del programa. Un estudiante musulmán de Birmingham fue golpeado por dos jóvenes blancos en los últimos días, y también aparecieron graffitis en la mezquita central de la ciudad con la frase: “Maten a los bombarderos suicidas”. Los directivos del MCB indicaron que “pese a todas esas señales, la controller de BBC 1, Lorraine Heggessey, “no está dispuesta a archivar el programa. Aceptó que había serias preocupaciones, pero señaló que la policía le había dicho que ese capítulo de la serie no tendría mucha repercusión”. Inayat Burglawala, secretario del comité de medios del MCB, le había escrito la semana pasada a Heggessey para indicarle el aumento de islamofobia que se estaba registrando “como segura consecuencia de la emisión de ese programa en el horario central de los lunes, cosa que es completamente inaceptable.” Acusó a la funcionaria de cometer “una grosera violación de sus responsabilidades en un servicio público. Es una deformación de la realidad y sólo puede servir para demonizar a la comunidad musulmana en su conjunto”. En su respuesta, Heggessey rechazó las quejas y preocupaciones, e insistió en que el episodio “se encuadra legítimamente en las líneas del argumento de Spooks” y que “ofrece una visión balanceada de un tema difícil”. “No ha habido nunca un incidente tan terrible en Gran Bretaña -siguió la funcionaria-, pero el programa examina el tema de un atacante suicida en una forma de ficción y especula acerca de lo que podría ocurrir si una cosa así ocurriera en Inglaterra”. Tormentas anteriores No es la primera vez que Spooks está en el ojo de la tormenta desde su aparición en las pantallas británicas. Durante el año pasado llovieron protestas de los televidentes -tanto a la emisora como al ente regulador de la TV inglesa, la BSC- a raíz de un episodio en el que un personaje de la serie -una mujer llamada Helen, integrante del grupo M15- fue torturada en una gran freidora de grasa y asesinada instantes después. Más de 250 televidentes elevaron su queja después de ver esas escenas. La espía había sido descubierta por una banda de fanáticos ultraderechistas y arrastrada hasta ese recipiente por sus captores, quienes primero le quemaron una mano y luego se dispusieron a hacer lo mismo con su cabeza. En el último instante, las cámaras se alejaron de la escena mientras se oía un disparo. Poco después, la BBC admitió que el episodio había sido “claramente perturbador” para un número de televidentes, y expresó que “lamentaba” que se haya producido ese efecto. Pero, a la vez, defendió a la serie Spooks, al definirla como “un trabajo serio de televisión que muestra la clase de amenaza que debe ser enfrentada por agentes comprometidos en la lucha contra el terrorismo”. En aquel momento, la BBC destacó que el programa había sido emitido después del horario de protección (9 de la noche) y que había sido precedido por una advertencia a los televidentes. El organismo de control (la BSC) no tomó medidas contra el canal ni el programa, al indicar que si bien la muerte de la mujer era “impactante”, la consideraba “aceptable e importante para el contexto de la trama y lo que ocurriría después en ella”. De todas maneras, la entidad puntualizó que no se había advertido al público con suficiente claridad “el nivel de violencia que sobrevendría” en las escenas posteriores.
Redacción Adlatina

por Redacción Adlatina

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