De la mano de Havas Colombia, Gabrica lanzó la campaña “No adoptes sin conciencia”, con el objetivo de reducir el abandono de mascotas después de Navidad.

La campaña cuenta con el respaldo de la Alcaldía de Bogotá y el Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA).

Todos los años en cada diciembre, miles de perros y gatos se convierten en el “regalo perfecto”, pero cuando pasan las celebraciones, muchos de ellos terminan devueltos, abandonados o ingresando a refugios que ya se encuentran desbordados. En Colombia, diferentes organizaciones reportan que el abandono de mascotas aumenta hasta un 40% entre enero y febrero, justo después de Navidad, cuando las consecuencias de un regalo impulsivo comienzan a hacerse visibles.

La realidad detrás de estas cifras es clara: se regalan vidas sin medir la responsabilidad. Niños que insisten, padres que ceden, familias que, aunque bien intencionadas, no están preparadas para asumir el compromiso de un animal que vivirá más de diez años y que requiere tiempo, recursos, paciencia y estabilidad.

En 2023, solo en Bogotá, según reportes del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (IDPYBA), se reportaron cerca de 11.860 casos de abandono, un promedio de 32 animales desamparados cada día. Al mismo tiempo, estimaciones recientes indican que en la capital hay más de 66 mil perros deambulantes, y que a nivel nacional entre dos y tres millones de animales viven en condiciones de calle.

A diferencia de otras campañas, esta no busca promover más adopciones, sino menos abandonos. Su mensaje es directo: amar a los animales también significa saber decir “no” cuando no se está listo para tener uno.

Carlos Palacio, Gerente Digital y de Publicidad de Gabrica, sostuvo: “En Gabrica creemos que un hogar solo es bueno para una mascota cuando quienes lo conforman están preparados para recibirla. Esta Navidad no queremos más impulsos, queremos más compromisos”.

La campaña hace un llamado a las familias a reflexionar antes de adoptar o regalar un animal. Porque detrás de cada cachorro abandonado hay una decisión precipitada y una vida que queda marcada por esa falta de preparación.