¿Qué significa seguir ganando en Cannes?
Es lo que digo siempre: para mí es el premio a la consistencia, que para mí es lo más importante. Ser consistente es la clave. A veces uno gana más y otro año gana menos, pero estar todos los años es brutal y creo que más todavía si uno gana así, rapidito, el lunes.
¿Qué puede comentar de las dos ideas premiadas?
Más que nada, que representan plenamente el espíritu David: ¡porque las dos son ideas de trainees! Son de gente que entró a la agencia, se le dio la confianza de meter en un brief importante, como el de Halls, o el de JCDecaux que además se resolvió de un día para otro, y de pronto con su primer trabajo en la agencia ¡están en el escenario de Cannes recogiendo un oro!
Algo que, si uno mira hacia atrás, tiene bastante que ver con su propia historia.
¡Tal cual, de haber venido aquí en 2003 y haber tenido la suerte de subir con mi papá a recoger un oro! Y me encanta seguir comprobando lo impresionante que es la cantidad de gente que ha ganado su primer león con nosotros, y nos gusta porque hay que crear cantera, sobre todo en estos años de home office y de tanta desconexión humana. Ser equipo y hacer cantera es lo único que nos mantiene vivos.
Y ademán están haciendo debutar clientes, ¿no?
Exacto: para JCDecaux y para Halls, esto es primer león para uno y primer oro para el otro. Una maravilla, y todo esto ocurrió gracias a los equipos, a la gente, a la confianza: con Saulo Rocha y André Toledo este año estamos cumpliendo nuestro décimo aniversario de trabajar juntos. Es familia.
¿Supone que esto va a seguir generándose de aquí hacia adelante?
Por supuesto, porque es cultura de trabajo. Lo veo en la oficina que abrimos en Nueva York con André, lo veo en Colombia: es la cultura de la agencia, es poner a la gente primero. Porque si tenemos buena gente, primero, y luego talentosa: ellos son los que hacen el trabajo, y el trabajo es el que hace que más clientes nos llamen. Y cuando más nos llaman, mejor trabajo hacemos. Y si con ese trabajo les damos oportunidad de trabajo a los jóvenes todo se convierte en un puñetero ciclo virtuoso que, a mi juicio, tuvimos la suerte de mantener y de hacer crecer.
¿Usted nota algún cambio en los marketers, están volviéndose cada vez más creativos como dicen por ahí, o son los mismos de siempre?
Yo creo que los buenos marketers se han dado cuenta, y hay muchos clientes de ejemplo, de que cuando ellos tienen una relación cercana a la agencia, cuando nos tratan como personas, cuando son tus amigos, cuando salen a cenar contigo, cuando se comparte más y te pueden llamar por teléfono para pedirte alguna urgencia, y tú a la vez puedes decirles “oye, este brief está mal”, se genera una relación que provoca mejor trabajo. Y, gracias a Dios, esto ocurre también con clientes grandísimos, como nos pasa a nosotros con AB InBev y Marcel Marcondes y con varios más: aún siendo tan grandes, pueden mandarte un whatsapp porque tienen un pedo urgente y eso genera trabajo que es imbatible.
LOS CASOS PREMIADOS
JCDecaux
Halls