Todo empezó con un rumor. En Cannes, Ed Meyer, su legendario conductor aceptó públicamente que estaban pesando en vender. Y dos meses después, el banco JP Morgan sacó al mercado la noticia: ellos estaban valuando Grey y la empresa iniciará su proceso de venta.
Inicialmente, los interesados eran: Omnicom, WPP, y Dentsu. Omnicom –el mayor grupo publicitario de la industria- enseguida anunció que se bajaba de la lucha por el último gran grupo independiente en pie. Dentsu quedó fuera por cuestiones de incompatibilidad cultural. Esto dejó a la empresa liderada por Sir Martin Sorrell como única candidata a adquirir el grupo. Muchos creían que esto podía generar un conflicto de intereses porque WPP maneja la mayoría de las cuentas de Unilever y Grey posee la cuenta de su competidor, P&G. Esto se resolvió. Y nuevos competidores aparecieron para calentar un mar que parecía apaciguado: Havas –ocupa el sexto lugar dentro del ranking de grupos- que haría una oferta junto a algún grupo inversor y el otro interesado es un grupo inversor estadounidense llamado Hellman & Friedman.
Sorrell en más de una ocasión mostró expresamente su interés por adquirir Grey aunque dijo que no sería una adquisición significativa para su grupo. También, declaró la semana pasada que tal operación, en caso de realizarse, no afectaría los negocios habituales de sus agencias. “Es una buena agencia con buenos clientes, buen management y un par de excelentes negocios”, contestó Sorrell ante las objeciones del Banco Morgan Stanley a la compra del séptimo grupo del mundo.
Grey, valuada en 1025 millones de dólares, recibiría ofertas de WPP, el francés Havas, y el grupo financiero, Hellman & Friedman, antes del miércoles –fecha límite-.
Havas, que debido a su tamaño no tiene el capital para comprar el grupo estadounidense de manera independiente, se unió a Deutsche Bank y Societe Generale Group para poder participar en la carrera por Grey. Aunque según fuentes del holding francés todavía no han tomado una decisión definitiva sobre si hacer o no una oferta.
Por su parte, los ejecutivos de Hellman & Friedman, no dieron declaraciones.
WPP
Ante la preocupación de los inversores, Sorrell dijo que empezaría ofreciendo apenas por debajo del precio de las acciones. (Muchos creen que una vez vendido Grey, sus acciones caerán drásticamente). Y muchos analistas se preguntan hasta que punto es lógico comprar un grupo que no le permitirá cumplir con el objetivo que él anunció dos meses atrás, de diversificarse a nivel global, ya que el grupo de Meyer posee la mayoría de sus negocios en EEUU.
AL mismo tiempo, WPP también tiene en la mira la compra de Moving Picture Company –empresa de efectos especiales manejada por ITV-. Price Waterhouse Cooper, durante la próxima semana estaría mandándoles memos a los 20 interesados en la adquisición de la compañía. El monto de la venta estaría en los 500- 600 millones de libras esterlinas.