(Ad Age) – Walmart dejará de vender algunos tipos de municiones y solicitará a sus consumidores no llevar abiertamente armas en sus pasillos luego de dos mortales enfrentamientos armados en sus locales, que presionaron al mayor retailer del país a alterar sus políticas vinculadas con las armas.

La compañía discontinuará las ventas de municiones calibre .223 y otras medidas que puedan ser usadas como armas de asalto una vez que haya vendido sus actuales compromisos de inventario, dijo en un comunicado a los empleados esta semana. El retailer también dejará de ofrecer municiones de revólveres luego que termine con su stock existente. Además, Walmart terminará con la venta de pistolas en Alaska, el único estado donde todavía las vende, y “pedirá respetuosamente” a los compradores no llevar armas a la vista en estados donde eso está permitido.

“Para nosotros está claro que el status quo es inaceptable”, dijo el CEO Doug McMillon en una declaración. “Sabemos que estas decisiones provocarán inconvenientes con algunos de nuestros consumidores, pero esperamos que ellos sabrán entender”.

Los movimientos –que según Walmart reducirán su participación de mercado de municiones a entre un 6 y un 9%, por debajo de los 20% actuales- representan los primeros grandes pasos de la compañía desde que los ataques en sus locales de Texas y Mississippi dejaron 24 personas muertas. Hasta ahora, su única respuesta había sido retirar los displays de video games violentos, un movimiento calificado por los defensores del control de armas como “inefectivo”.

“Sentido común”

McMillon, que reconoció ser él mismo un propietario de revólver, también reiteró su llamado al Congreso para debatir una prohibición de las armas de asalto y dijo que los chequeos personales deberían reforzarse. Envió cartas a la Casa Blanca y el Congreso en la última semana “para que actúen sobre esas medidas de sentido común”.

Walmart ya viene realizando chequeos de antecedentes en todas las ventas de armas y sólo vende a los consumidores que han pasado esos controles, dijo la compañía.

Los compradores que intenten llevar abiertamente las armas, excluyendo los funcionarios de seguridad autorizados, serán informados por miembros del staff sobre la nueva política con un enfoque “no confrontacional”, dijo Walmart, que agregó que pronto compartirá más detalles sobre cómo hacerlo en forma segura. Los empleados serán entrenados sobre cómo tratar a los consumidores que llevan armas en forma abierta, y habrá carteles en los locales que detallarán las nuevas reglas, dijo el vicepresidente Dan Bartlett ante los reporteros.

Walmart ha tenido que evacuar sus locales varias veces en los últimos meses después de que consumidores caminaran con armas en forma visible, incluyendo un incidente el mes pasado en Missouri cuando un hombre armado con un rifle y vestido con una armadura fue arrestado.

“Sabemos que la vasta mayoría entenderá la nueva política, y nos prepararemos para aquellos que no lo hagan”, dijo Bartlett.