Frito-Lay, de PepsiCo, utilizaría juegos online de video y conciertos para disfrazar campañas de marketing para sus chips Doritos dirigidos a teenagers, denunciaron grupos de consumo ante reguladores estadounidenses.
“Frito-Lay se ha infiltrado en la vida de los jóvenes para desarrollar publicidad encubierta centradas en cosas que ellos aman”, incluyendo video games y música, según la queja. La campaña digital incita a los adolescentes a comprar Doritos, Cheetos y las papas fritas Lay’s, que representan publicidad por 13.400 millones de dólares, del total de 57.800 millones que vendió la compañía el año pasado.
“No hemos recibido una copia de la nota ni documento alguno de las organizaciones”, dijo Aurora González, una vocera de Frito-Lay, en un e-mail, antes de que la queja fuera presentada. “Sin ver los documentos de primera mano, no quisiera hacer conjeturas de los alegatos”.
Las empresas alimenticias que alguna vez confiaron primariamente en
“Es toda una nueva frontera de la que los padres no están todavía muy advertidos, y no hay regulación para esos nuevos tipos de marketing”, dijo Story, que no está involucrada en la protesta. Story dirige
Las campañas “inmersivas” de marketing de Doritos incluyeron Hotel 626 y Asylum 626, juegos online interactivos que proveen una experiencia de film de horror, y un website que contiene un video de la cantante pop Rihanna, según la nota de queja. Estas campañas ocultan la naturaleza del marketing y son engañosas, sigue la protesta.
La administración del presidente Barack Obama está tratando de reducir la tasa de obesidad infantil, que casi se ha triplicado desde
Un grupo de trabajo de funcionarios de
Los reguladores, que enfrentan resistencia de parte de compañías de alimentación, incluyendo a Nestle SA y Kellogg Co., están ahora reduciendo esas líneas de acción para atender a preocupaciones elevadas por la industria y sus abogados, dijo David Vladeck, director del Consumer Protection Bureau de
Las líneas de acción finales recomendarán restringir los avisos de alimentos dirigidos a los niños menores a 12 años, en lugar de todos los menores de 18 años, como fue propuesto originalmente, dijo Vladeck. “
Los otros dos grupos que elevaron la queja son Consumer Action –un grupo sin fines de lucro fundado en 1971- y The Praxis Project, un ente con sede en Washington, también sin fines de lucro, que promueve la salud de la comunidad.