Tras la muerte de Horacio Diez, que se dio a conocer el lunes pasado, Adlatina tuvo acceso a la última charla que dio a través de Zoom en un ciclo organizado por la Asociación Argentina de Publicidad.

Diez abrió su charla agradeciendo a la asociación, y explicó que hablaría del contexto, pero no de la pandemia, del presente y del futuro y allí ver cuál es el ADN de un publicitario. Diez llamó a este momento que se vive como de transición.

El profesional citó una frase del pensador francés François de La Rochefoucauld, quien dijo: “Temor y esperanza son inseparables”. Diez expresó que esa frase hace mucho tiempo la tiene guardada, le sirve y lo acompaña para explicar determinadas cosas, y que hoy se vive una mezcla de las dos, esperanza y temor. “Esperanza de un futuro que inevitablemente no va a ser igual al presente y no debe ser igual. Hay muchas personas e instituciones heridas. Nuestra actividad también está herida, a pesar de que hay campañas y todo lo que vemos. Pero hay algo por lo que agradezco estar acá, y es compartir una convicción, este ADN como publicitarios, y por el juego de palabras, de aptitudes y actitudes para estar y ser parte”.

El publicitario aconsejó que hay que ayudar a las marcas, a la sociedad, a los entes de Estado y a las ONGs: “El objetivo es integrarnos más y no repetir eslóganes ni frases piolas. Los publicitarios tenemos que ayudar a persuadir a que todos hagamos cosas por convicción y no por conveniencia. Tenemos que trabajar para instalar convicción por lo que hay que hacer, dimensión del esfuerzo y del dolor que va a llevar esto. Hay que refundar y reconstruir muchas cosas”.

En ese sentido, expresó que hay que trabajar unidos y dio el ejemplo de lo que hizo la Asociación Argentina de Publicidad, con la Cámara Argentina de Anunciantes y con la Cámara Argentina de Agencias de Medios, que acercó propuestas al gobierno. “Ese tipo de tarea y actitud colaborativa para movilizar economía y sectores es lo que vale”. Por ello, subrayó la idea de que el trabajo de los publicitarios es construir pensamiento: “Lo que necesitamos es lograr resultados y efectos de largo plazo. En este contexto, se deben integrar aptitudes y actitudes como en un círculo de cosas que se dan”.

También recomendó: “Debemos ser serios, no avivados ni egoístas, ya que en este momento pensar con individualismo es perder la batalla. Se necesita sumar, integrar y escuchar al otro. Necesitamos conocimiento, ya que no podemos salir a la calle a observar, pero sí pensar en lo que está pasando y cómo persuadimos”.

Dentro de las aptitudes fundamentales, mencionó: “Es importante saber en qué somos fuertes y en qué somos débiles. Debemos tener criterio federal, no pensar las cosas desde Buenos Aires para todo el país. Reconocer los sentimientos presentes en cada lugar del territorio”.