Al reconocer que la explosiva expansión de la empresa fue lo que condujo a Toyota Motor Corp. a la crisis de las recalls, el presidente de la compañía Akio Toyoda anunció una serie de reformas dirigidas a asegurar nuevamente la calidad, entre ellas un uso más activo de las grabaciones registradas en los vehículos, informó ayer la revista Automotive News.
Toyoda, nieto del fundador de la automotriz, también indicó que no se presentaría personalmente a las audiencias del Congreso vinculadas con las fallas que han provocado el retiro de más de ocho millones y medio de vehículos desde el otoño pasado. Yoshimi Inaba, jefe de las operaciones estadounidenses de Toyota, “está más indicado para testificar ante los legisladores porque está más familiarizado con el mercado local”, dijo el directivo.
Toyoda está siendo presionado a visitar Estados Unidos, históricamente el mercado más rentable de la marca, luego de una emergencia que comenzó en el otoño boreal pasado y que fue creciendo como bola de nieve hasta alcanzar el nivel mundial. Entre los recalls figuraron dos acciones masivas para solucionar problemas con el acelerador en vehículos Toyota y Lexus, y otro para arreglar un defecto en los frenos del modelo Prius.
Inaba va a testificar el 24 de febrero ante el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes. La audiencia llega en medio de una nueva investigación que realiza la National Highway Traffic Safety Administration en torno a si Toyota actuó con lentitud para decidir sus recalls o si no incluyó la cantidad suficiente de vehículos en las mismas.
Un vocero del Partido Republicano en el Congreso dijo ayer que el Comité de Supervisión de la Cámara baja “hará las preguntas pertinentes” a Toyota.
“Yo pensaba que dada la tremenda atención existente hacia el señor Toyoda y su empresa, él habría aprovechado la oportunidad de aparecer personalmente y utilizar a la audiencia como un foro para seguir adelante”, dijo Kurt Bardella, vocero del representante republicado Darrell Issa, en un e-mail.
“Obviamente, Toyoda no está ansioso por darle al Congreso y al pueblo norteamericano las respuestas, como nosotros pensábamos. Está diciendo que la única forma en que comparecerá frente al Comité es mediante una invitación formal”.
Las reformas
En Tokio, Toyoda delineó varias nuevas medidas destinadas a mejorar la calidad. La compañía hará lo siguiente:
- Designará un chief quality officer para cada región geográfica.
- Expandirá la red de oficinas técnicas locales para realizar una localización de defectos in situ.
- Instalará un sistema de brake-override en todos los futuros modelos globales. (Por ese sistema se apaga el motor cuando los pedales del freno y acelerador se accionan a la vez)
- Se hará un mejor uso de la información grabada a bordo para analizar accidentes.
Estas normas se aplican sobre otras mejoras generales anunciadas por el presidente Toyoda días pasados. El directivo dijo que encabezará un nuevo Comité Especial para la Calidad Global.
El chief quality officer regional se sentará en ese comité y será responsable de reunir todo el feedback de los usuarios, para que la compañía pueda reaccionar más rápidamente cuando aparezcan los problemas.
El comité global tendrá su primera reunión el 30 de marzo próximo. Se anunció que todos los autos nuevos en Norteamérica vendrán equipados con el brake-override.
Además, la automotriz señaló que utilizará más activamente las grabaciones producidas en los vehículos, con aparatos similares a las cajas negras de los aviones, que registrarán la velocidad del auto y del motor en los segundos inmediatamente anteriores a un choque. “Al leer la data, podremos identificar las causas más rápidamente”, dijo en conferencia de prensa Shinichi Sasaki, vicepresidente ejecutivo a cargo de la calidad. “Pienso que eso producirá una mejora sustancial en nuestra capacidad analítica”.
El presidente Toyoda señaló que instalar nuevas oficinas técnicas, comenzando por Estados Unidos, permitirá a los ingenieros de fábrica estudiar rápidamente las quejas de los usuarios y cortar de raíz los problemas. El objetivo planteado es ser capaces de realizar inspecciones en el lugar en las 24 horas subsiguientes a cualquier falla informada por el público.
El directivo dijo que el training de los recursos humanos no ha mantenido el ritmo del enorme crecimiento de la compañía en la década pasada. El mayor fabricante de autos del mundo perdió de vista poner a la producción a la altura de la demanda real, un dogma clave en la estrategia de negocios de la compañía, señaló.
“Con la rápida expansión de la producción, tal vez no fuimos capaces de desarrollar las capacidades apropiadas y los recursos humanos”, terminó Toyoda. “La regla básica del sistema de producción de Toyota es construir solamente tantos autos como para que se pueda estar a la altura de la demanda, y fuimos nosotros los que quebramos esa regla”.