Después de construir su plataforma de campaña sobre la promesa de crear más puestos de trabajo en Estados Unidos, una compañía a la que Donald Trump urgió a los consumidores a boicotear está empezando a despedir a más de 10.000 empleados.

Macy’s anunció días atrás que recortaría su mano de obra en unos 10.000 empleados. De ellos, 3.900 son asociados de la compañía en locaciones que serán cerradas como parte de la reducción de 100 locales de la cadena, que tiene 728 unidades. Otros 6.200 empleados serán dejados sin trabajo mientras la compañía, un departament store de 27.100 millones de dólares, lucha para reducir sus costos anuales en 550 millones en medio de una escasez de ventas.

En el período de dos meses de vacaciones de noviembre y diciembre, las ventas de la compañía en iguales locales cayeron un 2,1%. Globalmente, Macy’s emplea a 157.900 personas, según la website de la empresa.

La noticia de los despidos llega después de los esfuerzos de Trump de boicotear a Macy’s después de que el minorista dejó de comercializar su línea de prendas de vestir para hombres en 2015. Macy’s había realizado el merchandise durante más de una década, e incluso mostró al candidato en varios comerciales, pero cortó su relación después de los comentarios racistas contra los mexicanos. En los 18 meses que siguieron a esa acción, Trump ha escrito a menudo tuits con el hashtag #boycottmacys y #dumpmacys.

Algunos usuarios de Twitter y partidarios del presidente electo inmediatamente salieron a la red social a celebrar las dificultades financieras de Macy’s y las pérdidas de empleos. “¿Recuerdan cuando @Macys llamó racista a Trump? ¡#BoycottMacys funcionó! ¡#Macy está recortando 10K puestos de trabajo y cerrando 68 locales!”, escribió @DrT_Joix.

Otras personas se manifestaron de manera similar.

En noviembre, después de los resultados electorales, el CEO de Macy’s Terry Lundgren dijo a TheStreet que seguía sosteniendo la decisión de dejar de comercializar la marca del presidente electo.