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RAÚL CARDÓS, JURADO POR MÉXICO EN EL FIAP 2002
“El Fiap es un termómetro para medirte con el resto de la región”
Raúl Cardós, director general creativo de Gibert DDB y presidente del Círculo de Creativos de México, uno de los dos representantes que su país tiene en el Jurado del Fiap 2002 –el otro es Pepe Becker-, respondió un corto cuestionario a daltina.com vinculado el evento que se realizará en abril próximo.
-Este año me ha tocado presidir el Círculo Creativo de México, así que eso tuvo mucho que ver, porque por lo general el Presidente del Círculo representa a México como jurado en Fiap. Por otro lado, quiero pensar que también tiene que ver con el trabajo en Gibert DDB hemos venido desarrollando y por el buen año que hemos tenido: Fuimos la agencia más premiada del país en la pasada edición del Círculo, Agencia del Año en el festival, Mejor Agencia de México en el Ojo de Iberoamérica, y bueno, me gustaría pensar entonces que es el trabajo lo que ha hecho que se fijen en mí y que se piense que puedo ser un digno representante de nuestra publicidad en Fiap. -¿Supone que la supremacía creativa de Brasil, España y la Argentina por sobre el resto de la región quedará en evidencia una vez más?
-No lo sé. Supongo que estos tres países llevarán muy buen trabajo al festival como siempre lo hacen, pero me gustaría pensar que habrá más países que se destaquen también (el término “supremacía creativa que quede en evidencia” me parece un tanto mamón, como decimos en México). Es un hecho que estos tres países por lo regular son los que más premios ganan, en lo personal admiro mucho el trabajo que hacen, pero también creo que México, por ejemplo, ha avanzado muchísimo y que Chile, Colombia, Uruguay, Venezuela y por qué no, el Mercado hispano de EU, por mencionar algunos, también están haciendo trabajo que puede destacar. He hablado antes también de Kráneo en la República Dominicana, que en un mercado muy pequeño está haciendo trabajo más relevante que muchas agencias en mercados más grandes o “respetados” creativamente, así que uno nunca sabe. Si bien es cierto que difícilmente Argentina, Brasil y España pierdan las primeras posiciones, también puede ser que más países se acerquen. Ojalá, porque en general sería buenísimo que la región siguiera elevando su nivel. -¿Tiene información de algún país de la región cuya creatividad pueda constituir una sorpresa en el Fiap?
-La verdad es que sería difícil hacer un pronóstico sin conocer demasiado el trabajo, pero sé que en Venezuela, por ejemplo, hay mucha gente tratando de destacar. Como dije arriba siempre están Chile, Colombia y Uruguay con muy buenas piezas, y México, cuya pasada muestra del Círculo nos hace albergar buenas esperanzas porque vimos muy buen trabajo de varias agencias. No lo sé, ojalá y no sea uno sino varios países los que nos sorprendan. -En la edición de 1999, Agustín Medina (presidente de La Banda de Agustín Medina, España, agencia perteneciente a Arnold Communications) decidió, al ser designado jurado, non inscribir piezas de su agencia como un modo de evitar suspicacias. ¿Piensa que su actitud constituye un modelo a seguir?
-Pienso que su actitud es muy respetable, como cualquier otra, pero no, no creo que sea ningún modelo a seguir. “El que nada debe, nada teme”, decimos en mi país. -¿Cuál es su percepción del Fiap? ¿Cree usted que es un festival que influye, al ser uno de los primeros en realizarse en el año, en las decisiones de los demás festivales internacionales?
-A mi juicio el Fiap es un festival al que no debes faltar. Es un termómetro para medirte con el resto de la región y conocer lo que se está haciendo en mercados similares al tuyo. En cuanto a su influencia sobre otros festivales, la verdad es que no creo que afecte demasiado. Por lo menos, no debería. Cada pieza que se juzga en cada festival debería evaluarse dentro del contexto en el que está. En este caso, estamos hablando de un festival regional, de Iberoamérica, con sus características y sus particularidades únicas. Supongo que bastantes de las piezas que ganarán aquí difícilmente las entendería un sueco o un holandés en Cannes, por ejemplo, y por cierto, creo que eso nos debería tener sin cuidado. Creo que iremos cobrando más fuerza como región en la medida en que nos ocupemos más de nosotros mismos y nos deje de preocupar “lo que pueda o no pasar en Cannes”, por ejemplo. Ahora, que a las piezas que ganan en Fiap esto les ayuda a “irse haciendo un especie de currículum” de cara a otros festivales, eso también es cierto y hasta cierto punto ayuda.