–¿Cuáles son sus expectativas para esta segunda edición del Sol?
–Que se reconozcan y se valoren las mejores ideas creativas, vengan de donde vengan. Sólo así este festival alcanzará el prestigio internacional que todos queremos.
–¿Qué significa para usted el ser elegido para trabajar en el jurado?
–Es una extraña sensación que ya tuve el honor de padecer en 1999. Por un lado, te llena de orgullo que te elijan representando a tu agencia; por otro, hay un vértigo (me temo que necesario) a la hora de juzgar justamente el trabajo ajeno. El objetivo final es que nuestro sector salga ganando. La mejor creatividad es el único motor para que nuestro trabajo pueda avanzar.
–¿Qué opina de la producción publicitaria española durante el último año?
–La tendencia hacia la contención por parte de los clientes es algo con lo que trabajamos cada día, aunque se vislumbre siempre la luz al final del túnel. Lo que vemos en televisión es fruto de todo esto. Sin embargo, alegra comprobar que existen maravillosas excepciones a este fenómeno. Ojalá fueran algo más que excepciones. De cualquier forma, hacer anuncios significa estar condenado al optimismo.
–¿Cuáles son a su juicio, los cinco mejores spots de TV de su país que participan en esta edición de El Sol?
–Me han gustado mucho cosas, como la película “Maratón” de Coca-Cola, los de Obra Social de Caja Madrid, el de Bocatta de la vida en el campo, “Fernando Alonso” de Renault y el de los animales tristes de Audi. (Pido disculpas si los nombres de los spots no concuerdan con los nombres reales).
–Finalmente, ¿cuál es su opinión acerca de la publicidad latinoamericana?
–Es cada vez más homogénea, y esa creo que es la mejor noticia. Cualquier país latinoamericano puede sorprender hoy con una gran campaña. Espero que dentro de un tiempo nuestra publicidad compita seriamente con la anglosajona.
–Que se reconozcan y se valoren las mejores ideas creativas, vengan de donde vengan. Sólo así este festival alcanzará el prestigio internacional que todos queremos.
–¿Qué significa para usted el ser elegido para trabajar en el jurado?
–Es una extraña sensación que ya tuve el honor de padecer en 1999. Por un lado, te llena de orgullo que te elijan representando a tu agencia; por otro, hay un vértigo (me temo que necesario) a la hora de juzgar justamente el trabajo ajeno. El objetivo final es que nuestro sector salga ganando. La mejor creatividad es el único motor para que nuestro trabajo pueda avanzar.
–¿Qué opina de la producción publicitaria española durante el último año?
–La tendencia hacia la contención por parte de los clientes es algo con lo que trabajamos cada día, aunque se vislumbre siempre la luz al final del túnel. Lo que vemos en televisión es fruto de todo esto. Sin embargo, alegra comprobar que existen maravillosas excepciones a este fenómeno. Ojalá fueran algo más que excepciones. De cualquier forma, hacer anuncios significa estar condenado al optimismo.
–¿Cuáles son a su juicio, los cinco mejores spots de TV de su país que participan en esta edición de El Sol?
–Me han gustado mucho cosas, como la película “Maratón” de Coca-Cola, los de Obra Social de Caja Madrid, el de Bocatta de la vida en el campo, “Fernando Alonso” de Renault y el de los animales tristes de Audi. (Pido disculpas si los nombres de los spots no concuerdan con los nombres reales).
–Finalmente, ¿cuál es su opinión acerca de la publicidad latinoamericana?
–Es cada vez más homogénea, y esa creo que es la mejor noticia. Cualquier país latinoamericano puede sorprender hoy con una gran campaña. Espero que dentro de un tiempo nuestra publicidad compita seriamente con la anglosajona.