“Nunca se sabe con lo que realmente te vas a encontrar hasta que lo ves. Un user-generated video dura entre 30 segundos y tres minutos, pero no se tiene idea acerca de su calidad”, dijo Rebecca Paoletti, director video strategy de Yahoo, para referirse a la poca cantidad de publicidad en los videos de Internet de origen amateur.
Si bien en este momento Internet ofrece millones de horas de entrenamiento UGC, la eficacia de este formato como espacio para comunicar mensajes publicitarios parece no ser muy aceptada por las marcas.
Desde que Google compró YouTube en 1,76 mil millones de dólares en 2006, ha venido desarrollando distintos formatos para atraer a los anunciantes. Sin embargo, todos sus intentos fueron muy cautelosos y de pequeña escala para no alejar a los usuarios.
Actualmente, las marcas que quieran pautar en YouTube pueden elegir aparecer solamente en los videos que son propiedad de Warner Music Group Corp. o de otras grandes compañías que tienen convenios con Google.
Con respecto a los user-generated videos, existe el programa YouTube Partner que permite a los usuarios obtener ganancias a partir de publicidad en sus video clips. Pero para participar, los usuarios deben ser aprobados, basándose en criterios como la popularidad de sus contenidos amateurs o si cumplen con las reglas del sitio.
Más allá de esta iniciativa de YouTube, el resto los sitios no hacen grandes esfuerzos por organizar los videos amateurs según su calidad.
“Las compañías cuidan a sus marcas con extrema cautela. Históricamente asociaron sus imágenes con contendidos de alta calidad y confiabilidad, y apropiados para los productos que tratan de vender”, dijo Jeremy Allaire, chief executive of video distributor de Brightcove Inc.
Paoletti coincidió al decir que las series televisivas o los eventos deportivos en Internet ofrecen una calidad que ya se conoce, pero los contenidos UGC no.
Suranga Chandratillake, fundadora de la compañía de búsqueda de videos Blinkx PLC, atribuyó este problema también al poco atractivo del formato, debido a que los contenidos amateurs son similares en todos los sitios y los usuarios podrían optar por verlos en aquellos que no tengan publicidad.