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EN UN ACCIDENTE AUTOMOVILÍSTICO, EL SÁBADO PASADO

Murió Don Maurer, Ceo de McKinney & Silver

Tenía 47 años y presidía la agencia que en 2000, para la revista Adweek, fue la mejor de los Estados Unidos. Había llegado a la agencia en 1996 como director de grupo de cuentas, para transformarse, un año después, en el tercer presidente en los 28 años de historia de McKinney & Silver.

Había comenzado su carrera en J. Walter Thompson y trabajado luego en BBDO Worldwide, Margeotes Fertitta & Weiss, The Mullen Agency y The Timberland Company (donde fue vicepresidente mundial de marketing), antes de arribar a M&S hace cinco años, para afrontar el período más turbulento en la historia de la agencia, que incluyó su separación de sus antiguos dueños, marchFIRST, y su venta, finalmente, al grupo francés Havas. “La pasión de Don Maurer por McKinney & Silver era ilimitada -declaró Cameron McNaughton, vicepresidente y director de servicios al cliente, al medio local Adweek-. Deja en herencia un gran amor por su staff y una devoción total hacia sus clientes. Nuestras oraciones y pensamiento están con su familia”. La agencia, basada en Raleigh, North Carolina, rápidamente “colgó” de su home page un canal que, bajo el título de “In memory of Don S. Maurer, presidente & Ceo of M&S”, da entrada a un breve pero sentido pantallazo de lo que sienten sus compañeros de trabajo ante su partida. Allí se señala, por ejemplo, que: • “En el orden personal, Don no podrá ser nunca reemplazado. Era un hombre de una gran integridad, paión y vitalidad”. • “Cualquiera que le preguntara a Don cuál había sido su mayor logro como líder de McKinney & Silver obtenía siempre la misma respuesta consistente y convencida: mi equipo. Un equipo que Don construyó, nutrió y amó”. • “Como parte de su compromiso para asegurar la realización de su visión para McKinney & Silver, Don lideró el establecimiento de un plan de gerenciamiento de crisis para la agencia. Un plan para asegurar la continuidad del funcionamiento de la agencia en escenarios imprevisibles pero posibles, como la muerte de uno de los directivos, incluyendo la suya. Su equipo se encuentra, en estos momentos, poniendo en práctica ese plan”. Don Maurer tenía dos hijas, Rachel, 19, y Sarah, 17. Su familia se completaba con su esposa Susan, sus padres Marilyn y Jerry (de Miami, Florida), su hermana Linda y su hermano William.

por Redacción Adlatina • 24 de octubre de 2001