Publicidad Gran Bretaña

EN APENAS DOS MESES, HUBO SENTENCIA FAVORABLE

Nike triunfó en la puja legal contra una competidora australiana que ridiculizaba su logotipo

El choque empezó el año pasado, cuando la compañía Skins comenzó a emitir avisos que ridiculizaban el célebre logotipo “swoosh” de Nike y criticaban su política de esponsoreo de deportistas. Ahora una alta corte británica acaba de darle la razón a la empresa multinacional, y su competidor se comprometió a no emitir nuevamente los avisos en ningún punto del continente europeo.

Nike triunfó en la puja legal contra una competidora australiana que ridiculizaba su logotipo
El logo de Nike invertido por Skins y su desprecio hacia “esas estrellas multimillonarias de caras de bebé, que reciben tanto dinero, y tienen cortes de pelo ridículos”.

Nike ha ganado el juicio que inició dos meses atrás contra la campaña de una marca australiana de calzado deportivo que utilizó abusivamente su famoso logotipo y criticó en su comunicación la estrategia de esponsoreo de la marca.

La compañía demandada por Nike fue Skins, que fabrica en su país de origen calzado de alta performance, y la sentencia fue emitida por una alta corte de Londres. La acusación central sostenía que el uso del logo constituía una violación a los derechos del copyright.

Nike recibió además una declaración escrita de parte de Skins que señala que  no volverá a emitir la campaña en todo el continente europeo.

 

Un caso paralelo

Skins había solicitado a la justicia inglesa que el caso fuera puesto en el “freezer” hasta que una corte europea se pronunciara sobre un asunto separado. Este último litigio, que podría demandar más de un año hasta alcanzar su conclusión, incluye a los operadores de teléfonos celulares O2 y 3.

Justamente, 3 utilizó una versión del motivo “burbujas”, de O2, en una campaña que comparaba los precios de las dos compañías. Skins adujo que su campaña también era un caso de publicidad comparativa.

De todas maneras, al margen de cómo concluya el choque entre O2 y 3, Nike se propuso proteger su marca. “Al margen de lo que pueda decidir la corte europea, y de lo que pueda pensar Skins sobre su caso, está claro que aquí ha habido una violación a los derechos del copyright y un mal uso de nuestro logo”, sintetizó un vocero de Nike.

 

El origen de la disputa

A principios de diciembre del año último, adlatina.com informó de la “inminente” decisión de Nike de trabar acción legal contra la campaña de Skins, que incluía la imagen de un deportista con una versión invertida del logotipo de Nike en la boca. La frase que acompañaba a la ilustración decía: “Nosotros no les pagamos a las estrellas del deporte para usar nuestros  productos. Ellos nos pagan a nosotros”.

La campaña de Skins se extendía a la televisión británica con el tema de las estrellas antideporte, utilizando frases como: “Todas estas estrellas multimillonarias de caras de bebé, que reciben tanto dinero, viven en casas enormes y tienen cortes de pelo ridículos...”. Lo que se conecta con otra idea, esta vez dirigida al público: “Nosotros no le vamos a pagar a usted un centavo para que use nuestros productos. Puede usarlos, si los paga.”

Ésa había sido la primera campaña publicitaria para Skins desde que se lanzó en Gran Bretaña en julio pasado.

En esa ocasión, el manager general de la operación de Skins en Inglaterra y el resto de Europa declaró que “la campaña refleja la actitud de la marca, y tenemos que elevarnos para avanzar en un mercado tan abarrotado de nombres”.

Durante 2005, Skins intentó una campaña similar en la propia Australia. En aquel momento, una vocera de Nike advirtió que el uso del logotipo había sido “incorrecto”, pero que su compañía no estaba “mayormente preocupada” por esa publicidad, y descartó una acción legal.

Pero en diciembre de 2006, la irrupción de Skins en Gran Bretaña –esto es, fuera de su propia base– pareció irritar mucho más a su rival multinacional. Allí se desencadenó la presentación judicial de Nike, que ahora ha arrojado un resultado favorable en las cortes británicas.

 

Redacción Adlatina

por Redacción Adlatina

Compartir