Hasta hace unos días, los blogs parecían ser una de las grandes promesas para la publicidad en medios específicos con targets bien definidos. Pero no tardaron en levantarse quienes consideran que la publicidad de empresas en los weblogs devalúa el medio.
Así nació Ad Free Blog, un grupo de bloggers que utiliza un búho como marca distintiva, para hacer saber a sus visitantes que ese sitio se encuentra libre de publicidad. Al incluir el búho, se está aceptando que se está en contra de la publicidad de empresas en los weblogs; que la publicidad degrada el medio y que no se acepta dinero a cambio de anuncios.
Hasta el momento, son 67 los blogs en español que se han integrado a la iniciativa, algunos de los cuales son considerados los más leídos. En wikipedia (enciclopedia virtual) se puede ver la lista completa de weblogs en español; y accediendo desde allí a un link se puede enlazar el sitio propio –siempre y cuando esté libre de avisos comerciales-, para formar parte de una red de navegación en anillo. Es decir, se puede navegar por los sitios que adhieren al búho.
Cuando se difundió la existencia el website que nuclea a este grupo –adfreeblog.org-, éste se vio colapsado, haciendo imposible el ingreso.
La blogósfera se encuentra hoy divida en tres posiciones: los que están en contra de la publicidad, los indiferentes y los que persiguen el dinero por este medio.
¿Para qué sirven, entonces, estos últimos?
Just inform it
Tal como publicara el viernes pasado adlatina,com, IBM, por ejemplo, es una de las empresas que consienten y fomentan que sus empleados participen de la bitácora de weblogs. Al permitirles a éstos que se identifiquen como parte de la corporación, lo que la empresa está haciendo es comunicar hacia afuera parte de su cultura corporativa. Por este medio se conecta con clientes actuales, potenciales, proveedores y futuros colaboradores, entre otros. No hace publicidad de sí misma, pero en cierto modo se está “vendiendo”. Una de las características positivas de los blogs es que otorga prestigio y legitima la posición de su realizador en el ámbito en el que se desempeña; por extensión, la empresa se beneficia de esta cualidad.
Si la resistencia a la publicidad de empresas en weblogs se extiende, siempre quedará la opción de comunicar cultura. Por otro lado, este vínculo informal podría resultar más beneficioso con los navegantes de la red sin el peso de la presión del mensaje implícito en cada anuncio: “¡consume, consume!”